Restaurante La Ria en Pontedeume

Liga con muy buenas vistas, terraza con con mesas en las que puedes comer raciones de paso que disfrutas del lugar. Gran apartamento con muchas plazas. En el trato son correctos y cualquier problema o duda en cuanto a alergias o intolerencias te lo solucionan. Merece la penaComida: 4/5  |  Servicio: 4/5  |  Ambiente: 4/5 …Más

Se trata de un clásico restaurante tipo bodas y comuniones en las "afueras" de Pontedeume, con una agradecida y reducida carta (perfecto!). Desprende un aire de años 80s, pero esto no desmerece sus dos especialidades, sino que las enmarca en el tiempo (muy recomendables): el rape a la cedeiresa y la carne asada. Clásicos imbatibles, a gusto de cualquier paladar, con raciones generosas. Todo rodeado de un ambiente clásico, tradicional y con toques de villa turística en zona rural. Dispone de una terraza con unas vistas impresionantes al golfo de Artabria y a la ría del Eume. El servicio es muy amable y risueño. Un lugar en el que te irás satisfecho y sin grandes sorpresas. Óptima opción para grupos grandes de más 8 personas.Admisión de niños: Restaurante tipo boda y comunión, bien adaptado a familias y niños.Aparcamiento: Dispone de varias zonas de aparcamiento en ambos márgenes de la carretera.

Rápido servicio y buena atención, todo estaba rico.De las vieiras nos saque foto pero estaban muy buenasAparcamiento: Tiene un gran aparcamiento privadoAcceso para sillas de ruedas: Tiene ascensor

Impresionante el sitio unas vistas espectaculares y la comida increíble

Restaurante típico gallego que dispone de un espectacular terraza la atención al cliente fue bastante buena.

Excelentes vistas a la ría con Ares de fondo, a 3 minutos de Pontedeume en coche. El restaurante típico gallego, con buena carta y precios algo altos aunque razonables por el entorno y la coyuntura. El pescado fue lo que no estuvo a la altura, quizá por mala suerte… volvería!

Impresión agradable, después de años sin visitarlo, excelentes vistas con Ares y Redes al fondo, a la derecha Cabanas. Buen producto, muy buen servicio y la relación calidad/precio extraordinaria. Volveré y lo recomendaré.

Reservamos en este restaurante para cenar aprovechando que se pronosticaba que iba a hacer un gran día y porque cómo la zona va a ser un lugar que frecuentemos a menudo dentro de unos años queremos ir conociendo la hostelería de los alrededores.Lo primero que nos llamó la atención es que al comentarle al camarero que estaba en la barra que habíamos reservado una mesa para cenar nos dijo que nos sentaremos donde quisiésemos. Nos sentamos en la terraza, para comentarle a otro de los camareros. Cuando se nos acercó a la mesa nos comentó que en la terraza solo se toman tapas/pinchos y que para cenar es en uno de los comedores de los que disponen. Optamos por el comedor, aunque seguimos muy sorprendidos por no tener mesa reservada (bien es cierto que tenían mesas de sobra).La carta es abundante, con una buena cantidad de entrantes, carnes y pescados. Optamos por comer todo al centro pidiendo una ración de almejas a la marinera (18 euros), una de gambas al ajillo (14 euros) y presuponiendo que iban a ser raciones pequeñas, añadimos una de raxo (8 euros) para asegurar.Nuestro primer error fue suponer que la ración de almejas sería pequeña. Como podéis ver en la foto, era una ración muy abundante. De hecho, mi pareja y yo al verla ya nos dimos cuenta que podíamos cenar con las dos primeras raciones que teníamos en la mesa. Fue una equivocación por nuestra parte, pero tampoco estaría de más alguna indicación por parte del camarero.La ración de raxo la probamos para ver cómo estaba pero prácticamente quedó entera en el plato. Y hablando de sabor, sin ser nada memorable, la verdad es que la relación precio/cantidad/sabor estaba por encima del aprobado.Para terminar, tomamos un tarta de queso fría para compartir y unos cafés. Señalar que los postres no eran caseros.Por último, señalar que al ver el camarero que no tomamos la ración de raxo nos preguntó el motivo y a la hora de tomar el café nos ofreció unos chupitos. Dimos por hecho que si nos los ofrecía sin pedirlos, y teniendo en cuenta el tema de la ración de más, sería invitados... Error, nos lo pasaron el el ticket. Un gesto que no nos acabó de gustar.En resumen, nos pareció un restaurante que sirve para un día que no haya planes cenar algo sin muchas pretensiones con unas buenas vistas de la ría. Aún así, nos lo anotamos más en la lista de sitios para tomar unas copas en la terraza (mejores vistas que el comedor) mientras nos tomamos un pincho.

Comida muy buena.. porciones generosas y precio NORMAL para la zona que es..Atención del personal: muy buena.Relación calidad precio: normal/buenaComida: muy buena