Casa de Amancio en Santiago de Compostela

Me pareció excelente por todo. Situación en el medio de una pequeñaAldea, arboles y todo ello acompañado por el paso de peregrinos.A mayores y no menos importante. LA COMUDA Y EL SERVICIO QUE TE HACEN LLEVAR UNA COMIDA MUCHOMÁS LLEVADERA. Excelente. La gente debe de marcar en su mapa con una chincheta y el peregrino no debe de deja r de para en el.

Llegamos un sábado, vestidas de peregrinas y muy amablemente nos invitaron a marcharnos.Resultó que el sábado no interesaba dar servicio a los que realmente vamos haciendo el camino, dábamos mala imagen para su local.La sanción fue bastante fea, ya que nos sentimos desamparadas por no cumplir con la vestimenta ideal que ellos deseaban.Solo nos ofrecieron poder tomar un colacao caliente en una especie de terraza al exterior, donde además llovía a mares.Fuimos tratadas como despojos.Igual si vas un lunes les interesa tu monedero, pero en fin de semana No.

Parada a desayunar antes de llegar a Santiago. Desayunamos tortilla de patata increïble de buena.El servicio espectacular, súper amables y atentos. Cosa increíble en el camino francés que escasea la amabilidad de los gallegos.Recomendable 100 x 100

Hemos estado en el restaurante. Realmente estupendo, con platos elaborados con una buena presentación. Camareros eficientes a mas no poder. El entorno está muy cuidado, tienen una terraza para comer al aire libre de maravilla.Servicio: 5/5  |  Ubicación: 5/5 …Más

Magnífico restaurante en un ambiente precioso, una joya escondida en Santiago. Comí a la carta como peregrino y repetí dos días después para probar el menú del día, a 13 €, probablemente uno de los mejores que se puedan encontrar en relación calidad-precio. Atención muy buena también. Para volver.

Descubrimos este lugar por casualidad, buscando hacer noche cerca de Lavacolla para coger un avión temprano. Nos guiamos por las buenas recomendaciones de otros viajeros y hemos de decir que Casa de Amancio ha sido un fantástico descubrimiento. El personal es de 15 sobre 10. Amables, cercanos… La habitación es muy confortable y cuenta con sofá y una cocina, aunque en nuestro caso no hicimos uso de ella. Delante de cada habitación hay una mesa para poder comer fuera. La comida merece mención aparte. Todo lo que probamos de 10. Os lo recomendamos muchísimo y nosotros la próxima vez vendremos sin prisa.

Felicidad es la descripción de descansar y comer en Casa Amancio. Tuvimos una cena deliciosa por la calidad y el entorno El desayuno es espectacular. Se nota que saben lo que un peregrino necesita. Las habitaciones son muy confortables y la finca es muy bonita , genera paz y armonia. Destacó la amabilidad de Carlos y de todo el personal. Lo recomiendo 100%

Sorprendente bar y restaurante al pie del Camino de Santiago en una centenaria casa de piedra. Muy acogedor, con una carta excepcional pero también con menú del día de platos igualmente elaborados, ideal para familias porque tienen un jardín interior para dejar a los niños sin peligro alguno. También tienen una terraza bajo una parra y otra bajo una marquesina, todo realmente original y único.

Opino lo mismo que otros peregrinos... No me inspira mucha confianza. Sólo pedí un café americano y el hombre que me atendió casi lo cobra a precio de ciudad turística, no a precio de peregrinos (1,70€)La otra chica que atendía vio la cara que puse al escuchar el precio y mientras rebuscaba en el monedero lo que faltaba para pagarlo dijo: "No, el americano es 1,50€... Es que han cambiado los precios"Lo dicho... No inspira demasiada confianza si a cada persona que pasa le cobran una cosa diferente dependiendo del origen de procedencia del cliente o del camarero que atienda.Terminaré diciendo algo positivo: Afortunadamente el café estaba bueno.