Universal Cafe Bar en Santiago de Compostela

El trato de los camareros al cliente es súper buena y la comida de calidad, en una zona universitaria y con unas vistas geniales!!!! Y sobre todo es que la plaza donde está es súper tranquila y cómoda!!!!!

El servicio fue pésimo, comida mediocre para el precio que costó, todo desabrido y hecho a la ligera. El camarero es muy poco honesto y se intenta aprovechar de los turistas y nuevos en el lugar. Además, te escriben las supuesta "cuenta" en un cacho de papel y no en un ticket como debería ser. El sitio más engañoso de Santiago.

Ración de pulpo hay que pedir tres o cuatro para dos para que llegue a algo y son 16,50€, eso sí, buen sabor. 6 croquetas, tres más o menos bien, las otras tres congeladas como de un mes más o menos y bastante malas, café bastante bueno y señoras un poco ariscas. Mejor buscar otro sitio.

Lo único que ha valido la pena ha sido la tarta de queso. El servicio nefasto, más de 15 minutos entre plato y plato. Las croquetas más secas de mi vida. No repetiré ni aconsejo tomar nada aquí si no cambia mucho.

No ha estado mal. Merluza. Patatas ensalada. Sándwich. Bebida. Hemos pagado 28€ para dos. Cosas a mejorar poner otra persona en la hora punta. Una sola camarera hace que tarden un poco las cosas. Pero no es su culpa, es demasiado para atender en tiempos óptimos.

Menú a 13€. 4 primeros 3 segundos. Cojimos mesa a la 13h. Y suerte porque a la 13:30 estaba ya a petar. Trato serio por parte de las camareras. Pero correcto. Los niños (3/8) compartieron menú. Y lo que quedó para llevar. Lo peor la poca paciencia de algunos clientes. Restaurante lleno y se quejan de las camareras por hacer "esperar".

Este sitio es una falta de respeto a la hostelería y el buen servicio. Fuimos 3 personas a pedir el menú del día (horrible decisión) y estuvimos+ de 45 minutos esperando para comer viendo cómo mesas que se sentaban y pedían cosas fuera del menú comían, pagaban y se iban, fueron como 4 mesas así. Nunca en mi vida he vivido algo así, los que pedían fuera del menú eran más importantes que nosotros sin saber yo el por qué.

El pulpo muy rico, precio normal y muy lento el servicio. Me pedí unos callos y la carne estaba fría pese a haber tardado más de 30 minutos en hacerlo. La tarta de Santiago rica.

Es un lugar donde el servicio es nefasto, la comida mala, las formas aún peor.La camarera te perdona la vida cada vez que la llamas.Te ponen el Fidelio caliente y te lo cobran a precio de oro . Protestamos y pedimos libro de reclamaciones .Nos dicen que deberían quitar el camino que ellos con los estudiantes tienen bastante . No lo recomiendo ni a mi peor enemigo .