Bar La Plaza en Riópar

Terraza amplia, buen servicio y las raciones muy buenas. Excelente sitio para ver un partido de futbol mientras cenas

Personal amable pero la comida ni fu, ni fa.Raciones escasas y caras por la calidad, que es muy basica.Se nota que quieren darle un giro mas elaborado a la comida, pero no lo terminan de conseguir. Si apuestan por cambiar la materia prima el lugar valdra la pena en un futuro.Lugar bien para tomar algo, pero para comer no lo recomiendo.

Era dia de pascua y estaban todos los bares y restaurantes atope, por suerte nos topamos con este bar, Alícia nos dió una atención de 10 y todas las tapas que nos recomendó buenisimas, no doy cinco estrellas por que el precio nos pareció un pelín elevado

Raciones minúsculas a precio caro.Poca variedad y además de lo poco que tenían no les quedaba casi de nada.UN CONSEJO PARA EL PEDAZO DE EMPRENDEDOR QUE DIRIGE ESTE NEGOCIO, señor mío, si quiere usted ganar dinero, hágalo apostando por la calidad y el buen servicio, que es lo que la gente está dispuesta a pagar. No gane usted dinero a consta de tomar el pelo a la gente que por malas pasadas del destino recala en su más que humilde abrevadero. Perjudica usted a su negocio y a su pueblo.

La comida muy buena, el servicio buenísimo... El precio espectacular. De hecho repartimos...😋

Nos han atendido muy bienY la comida muy buena

Bonito sitio de pueblo. Para estar con noños

Hemos comido de cine ! Todo buenisimo! Y el precio genial!

Fuimos con un grupo bastante grande (una excursión). La comida y el servicio en general bastante bien. Como puntos negativos destacaría que para alguno de los comensales, dentro del menú concertado, se pidió un menú especial, para diabetico y lo que se le sirvió fue un poco de lomo a la plancha con guarnicion de cebolla de alguna carne asada. Habríamos esperado al menos un poco de verdura y no cebolla asada como guarnición. Por otro lado, siendo un grupo bastante grande, la distribución de las mesas no fue la más idónea en tiempos de covid, si bien no había más de 10 personas por mesa, éstas estaban demasiado apretados como para poder comer sin dar codazos involuntarios a las personas sentadas a nuestro lado (viva la distancia entre no convivientes)