La Mascarada en Altea

Una noche que prometía y que nos fastidió una de las empleadas. Dicen que tiene carácter. Yo tengo carácter, lo suyo es poca educación y soberbia.No vuelvo.

Fuimos a hacernos un cóctel en la terraza la verdad es que nos atendieron muy bien no podemos quejarnos el lugar muy chulo en la plaza de la iglesia y el ambiente espectacular

Calidad/precio pasable. La pizza estaba bastante buena pero la ensalada no tenía nada y cara

Restaurante situado en una zona privilegiada de Altea. Los platos bien en general: las pizzas, bien; la ensalada caprese, mejorable; las bruschettas utilizaban un pan de base difícil de cortar y el Tiramisú, bien realizado y presentado, aunque para estar de diez le faltaba un toque de sabor a la crema del mascarpone, quizá el café o un poco de amaretto le hubiera venido bien.Repito, bien en general y precios en línea con lo esperable

Es el mejor lugar peculiar para disfrutar de la mejor copa, Elena a la cabeza y su equipo hacen que todos los días salgas con una sonrisa, las copas mejor imposible y los combinados especiales. Sin duda alguna, lo recomiendo, junto a sus vecinos hacen con mucho cariño que la plaza de la iglesia sea fantástica.

Nos sentamos en una mesa y cuando nos quisimos dar cuenta estaba todo el asiento lleno de hormigas y nosotras también. Se lo comentamos a modo anécdota al camarero y para que supiera lo que estaba sucediendo y lo que hizo fue vacilarnos, no creer lo que le estábamos contando y reírse de nosotras sin ni siquiera pedir disculpas diciéndonos cosas como “recuerda que en la película de bichos, las hormigas eran buenas”; pudiendo además escuchar como al entrar al local lo comentaba con sus compañeras y se reían los tres.Entiendo que el hecho de que haya hormigas en una terraza no dependa de ellos, pero la falta de respeto y educación sí.Desde luego sitio al que no volver

Lugar especial donde pasar una tarde-noche espectacular ,

Muy buena atención, ambiente relajado y muy agradable. Recomendable para cenar y para tomar una copa despues

El lugar está genial. La planta baja decorada con máscaras y la azotea con unas vistas espectaculares. Genial para tomar una copa tranquilamente.Las copas normales, tienen bastante variedad.Recomendable.Lo único que la persona que nos atendió fue un poco desagradable. Es verdad que para subir a la azotea había bastantes escaleras y ella tenía que subir cada vez que queríamos algo, pero tampoco es nuestra culpa.Nos dijo que si no nos decidíamos rápido, tendríamos que bajar nosotros a pedir las copas. Después le pedimos agua y nos dijo que iba a tardar un buen rato en subirla.Pero bueno, en cierto modo, es comprensible.