El Rancho de la Patata en El Campello

Fuimos 2 y pedimos una patata asada rellena para cada uno, la marinera y la popeye (nos pareció la peculiaridad del lugar) y bien. Llenan bastante aunq si vais con mucha hambre si que puede ser buena idea pedir algo más. La atención fue buena, muy amables y rápidos a pesar de tener el local lleno. Lo recomiendo para una comida o cena de guerrilla si quieres comer algo diferente.

Nos encanta ir de vez en cuando, aunque sea una vez al mes. Siempre me pido una patata vegetariana y está buenísima.Platos vegetarianos: Tienen patatas con distintas salsas y patatas rellenas vegetarianas y veganas.Adecuado para niños: Es de fácil acceso para niños, cerca de la playa, no hay desniveles y pueden jugar en el paseoAccesibilidad para sillas de ruedas: Está todo a un mismo nivel, es muy cómodo

He ido varias veces, las patatas rellenas están muy buenas, son grandes con una estás más que lleno y la más cara creo que son unos 8€ aprox. Además tienen tablas de patatas y carne con distintas salsas, muy buenas. sólo tengo pendiente probar el postre🤣. Muy buen servicio y rápido

Raciones generosas, servicio rápido. Las patatas rellenas estaban buenísimas.

Hoy he ido a cenar sola con mi hijo de 2 años, en cuanto nos hemos sentado no han tardado ni un minuto en traer la bebida pero para una tabla de patatas han tardado más de 20 minutos.He pedido una tabla de 9 salsas por la variedad de salsas, el chico me ha preguntado qué si las quería picantes, le he dicho que si. Bueno pues ni picantes ni variedad, de las 9 salsas una de ellas repetida 3 veces y otra repetida 2 veces, total que para eso hubiese pedido una 6 salsas.Se lo he dicho a uno de los chicos y me que si he especificado que fuesen diferentes salsas... Le he dicho que creo que no era necesario y que su compañero me había preguntado por si quería picantes y tampoco, ha ido a preguntar y me comenta que no lo había apuntado su compañero...Otro detalle muy feo es que se han ido de la mesa de al lado y uno de los chicos rubio de ojos claros se ha quejado con que no le habían dejado propina...Una pena que con el buen trato que han tenido las mujeres que me han atendido, todo haya ido mal.

Patatas, patatas y más patatas. Ideal si hay poca gente porque puedes relajarte con una de sus grandes jarras de cerveza. Cuando el local está a reventar, que lo estará a menudo, los camareros sutilmente te mostrarán que necesitan las mesa. Algo normal cuando tienes gente para atender, pero que te deja mal sabor de boca.

Para empezar las salsas son insuficientes para la cantidad de patata (frita congelada) 8€ por un plato de patatas congeladas me parece excesivo,por otra parte las patatas rellenas calentadas a microondas, les faltaba sal y condimentos por no hablar del queso chicloso 8€... La verdad es que no repetiría. Además se equivocaron de salsas en nuestro pedidos, no limpiaron la mesa antes de sentarnos. No volvería...

Para cenar rollo informal y rico está genial, y si vas con niños todavía más. Tiene unas tablas de carne y patatas con salsas que gustan sí o sí.

Sitio perfecto para ir a comer entre semana en invierno. Casi no hay nadie, al solecito, delante del mar, con tu tinto de verano... Y la tabla de carne con patatas y salsas a elegir. Buenisima.