Vinoteca Planta 14 en Mieres

Local muy agradable, personal encantador y muy atento y, por supuesto, platos deliciosos, bien preparados y presentados y originales. Muy recomendable.

Un sitio espectacular con una atención exquisita.Sorprendentes las patatas hojaldradas, las croquetas de chipirones y no os podéis perder el tataki de atún rojo.Increíbles los helados de arroz con leche y de naranja artesanos.... La tarta de queso, la atención... Todo

Hoy por hoy una de las mejores cocinas de Mieres. Innovación, calidad en la cocina y una materia prima excelente. El trato genial, un gran sitio para disfrutar de una gran velada.

Hace tres años la cocina destacaba por su calidad e innovación. Desde que cambiaron al personal de cocina, la comida ha ido de mal en peor.He ido dos veces en el último semestre, y no habrá una próxima vez!Presumen de cocina leonesa... he tenido ocasión de degustar la famosa tortilla guisada en varios establecimientos leoneses, y estoy en condiciones de afirmar que lo que aquí se sirve como tortilla guisada no es más que una mala tortilla seca, con 4 verduras por encima. No se le parece en nada!!En una segunda ocasión tenían unas jornadas de pulpo, por lo que aproveché para pedir un plato del mismo. El resultado fue algo incomible: pulpo recalentado (sospecho que en microondas), y con varios trozos duros como la cáscara de un centollo. No se pueden organizar unas jornadas gastronómicas sin un producto de calidad, y mucho menos sin alguien en cocina que no tenga idea de cómo prepararlo!!A primera vista, lo único que hacen en cocina es calentar los platos, darles un toque estético (algunas veces acertado; otras un desastre), y servirlo a la mesa. Con esto no se va a ningún lado en un local que pretende ser referencia. Es preferible dar una comida tradicional (pero de buena calidad), que querer llegar a donde no se llega. Porque no hay más que ver el minúsculo tamaño de la cocina para comprender que eso es "un quiero y no puedo". Como digo: la cocina ha perdido muchísimo desde que se marchó quien "gobernaba" ahí, y se nota un montón!De seguir así les auguro un futuro tan oscuro como su nombre. Y que conste que el trato por parte del personal es exquisito (de ahí mis dos estrellas), pero a un restaurante se va disfrutar del paladar (obviamente bien atendido, por supuesto), y en la parte culinaria hacen aguas por todos lados. Una pena...

Buen trato y atención. La comida riquísima. No habíamos comido unas costillas así hace mucho tiempo. Excelente en cantidad.

En la calle Covadonga, zona peatonal. Una buena opción para cenar algo diferente.Tienen la opción de ración o media ración, que está muy bien para probar varios platos.De primero 1/2 ración de croquetas de chipirones en tinta (4 unidades), deliciosas.Después unos Calamares frescos en tempura de Ajoarriero, cebolleta y jalapeños, muy ricos, y llenan muchísimo.Y después, Solomillo ibérico a la brasa.No nos quedó sitio para el postre😅.El local no es muy grande, pero es acogedor. Tiene un mural precioso del grafitero "El Séptimo Crío" que es una maravilla😍.Los baños están en la planta baja, sin ascensor, por lo que no es muy recomendable para personas de movilidad reducida.En general muy recomendable 🔝🔝

Es la segunda vez que voy y salimos encantados. Raciones abundantes y comida deliciosa. Dan un giro original a las tapas de siempre

De los mejores sitios calidad/precio de la zona. Productos variados y carta elaborada. Puedes encontrar las "cosas de siempre" como tortilla de patatas, croquetas, patatas tres salsas, etc. con un toque de originalidad. Hemos venido ya varias veces, todo el personal es siempre encantador y muy competente. Sin duda de los primeros que recomiendo en Mieres.

El esfuerzo y el trabajo tienen su recompensa.Una fusión Astur-Leonesa que no se puede obviar. Una cocina internacional que sigue ahí. Una cocina tradicional que te conquista.El pastel de pintu con la mayonesa y los encurtidos es una gozada.Las Croquetas de botillo, riquísimas. Con que mimo están hechas para que el botillo no te coma todo el sabor, y ese toque de pimentón -premiado por cierto- que lo une todo.La Causa Limeña, picantita, refrescante, ácida, untuosa, sabrosa, toda Sudamérica en tu plato. Sorprende en cada bocado.La tortilla de boletus guisada, te lleva directamente a la cocina de carbón de tu abuela, de tu madre, de antes, reconfortante y humildemente exquisita. Un acierto total.El entrecot sin palabras, un clásico de la carta que nunca falla. Saborazo. Producto bien trabajado.No dejéis de ir, nos quedan muchas cosas por probar pero, la nueva carta es un descubrimiento que hay que disfrutar.Con mucho trabajo y mimo detrás y un producto no solo excelente, además excelentemente tratado. Enhorabuena al equipo, lo habéis vuelto a hacer. Y no es fácil. Gracias por una comida genial.