Hostal Puente del Pilar en Ribadesella

Un sitio con encanto en un lugar con encanto.Es como estar viviendo en una gigantesca casa de muñecas.Toda una experiencia.No tuve la oportunidad de comer nada allí pero creo que estaba todo delicioso según lo que me han contado.¡Ojo! si tienes fobia a las arañas quizás este no es tu sitio.

No me alojé allí al final pero debo reconocer que el entorno es poco menos que paradisíaco, las habitaciones poco menos que perfectas si vas en compañía para ir solo sobra. A mí me tendré una señora para enseñarme la habitación y debo reconocer que la buena mujer dio todo de su parte para convencerme de quedarme pero por circunstancias ajenas no lo hice. Como puntualización diré de que para que te atiendan tienes que llamar por teléfono pero en términos generales y salvando ese detalle... No me hubiera molestado para nada el pernoctar allí

5 estrellas me parecen pocas.Increíble sitio, ambiente acogedor y familiar.La comida, buenísima.Sin duda volveremos.

excelente ubicación, entorno precioso, acogedor, cuidadisimo, coqueto.Uno se siente como en casa y no se iría nuncaQue paz transmite el lugarQue amables son los propietarios y su equipoComo se esfuerzan, como te cuidanQue bien se come.Que buen producto ofrecen.Me faltan palabras para explicar todo lo que aquí he sentidoSin duda un lugar para volver tanto para visitar la zona como para simplemente relajarse y disfrutarUn placer descubrir este sitio y conocer a Fernando y su equipo.Muy muy recomendable 👍

Cada año, en vacaciones, vamos a cenar por allí, comida riquísima, trato excelente y sitio con un encanto muy especial. Muy recomendable

Precioso lugar para comer. Parece un sitio de cuento. La comida muy buena. Todo hecho con. Cariño.

El trato de Fernando y el resto del personal, cercano y atento. Casa y restaurante tienen mucho encanto. Decoración y detalles cuidados al máximo. Hay para estar tiempo disfrutando de cada rincón. La hortensia es la reina del jardín y decora las diferentes estancias. La comida es excelente, con una completa carta de platos caseros incluyendo opciones veganas. Y cuando te dan la cuenta, te encuentras con que está hecha a mano, con dibujos coloreados por Fernando. Un buen recuerdo!!

El lugar nos cautivó por su encanto. El jardín es muy chulo y la decoración también.Lo primero comentar que el sabor y la calidad de la comida está bien (tampoco es nada que no puedas encontrar en otros sitios). La parte por la que no volveré ni recomendaré es porque me quedé con hambre cuando en otros sitios pidiendo lo mismo salimos saciados.Raciones/platos caros para la cantidad que ofrecen.Suplemento de 10% por comer en el jardín, ojo!Una vez y no más.

El lugar simplemente espectacular, la decoración, el jardín, el entorno... Todo de 10, pero si algo es digno de mención es el personal, madre e hijo son personas extraordinarias, la comida casera y con productos de temporada y ecológicos es para enmarcar. Los postres caseros dejaron a mi pareja sin palabras, especialmente el tocino de cielo. Un lugar para repetir sin duda!