Vida Padre en Chiclana de la Frontera

Ambiente espectacular buen servicio ,buena comida ACCESIBLE MINUSVÁLIDOS

Un restaurante muy bonito y acogedorRapidez en el servicioCamarero es muy atentos y pendientes en todo momentoNo hay más fotos porque salen personasRecomendableAparcamiento: Es un pinar con mucho espacio

Respecto a la comida y el sitio, la única queja es que en algunos platos la cantidad es muy escasa. La calidad de los platos sí es buena.Lo peor es que al reservar te exigen dar la tarjeta de crédito, que será cargada con 8 euros por persona si cancelas el último momento o no vas. Me parece un abuso, ya que eso sólo lo hacen restaurantes que no doblan mesas.No he visto hacer eso en ningún restaurante de la zona, y sinceramente, el sitio normalito dentro de su rango

Servicio pésimo, no vamos a volver.A la hora de reservar piden una tarjeta para hacer un cargo de 8€ por persona por si no te presentas a la hora (también pasa en otros negocios pero con la calidad de este servicio me parece una falta de respeto). Cuentan con una amplia terraza y salón interior, pero además reservan las mesas altas de la zona de bar (sin duda para maximizar los beneficios e intentar servir más mesas de las que son posibles).Hasta aquí todo bien. El problema viene cuando te presentas a la hora y te toca esperar 40 minutos porque las mesas altas están ocupadas por gente que espera a su mesa en la terraza o en el salón. Si un restaurante reserva una mesa, no puede tenerla ocupada a la hora en la que tiene que estar libre. Sobretodo cuando has exigido un compromiso de puntualidad. No te dan explicaciones al respecto, y una disculpa tampoco.Los camareros, sin experiencia y perdidos por las mesas. Por los precios de la carta deberían ofrecer un servicio de calidad. Pero lamentablemente no es así.Las croquetas de cecina estaban buenas.

El concepto del restaurante es muy original, la comida con la descripción de la carta es díficil de imaginar lo que te van a traer. Escasa y cara, un plato de simples patatas fritas 8,5€, porque no encontraba algún plato para una niña de 6 años. Las mesas son tan pequeñas que no caben los platos y los camareros tienen que hacer juegos de Tetris para meter con calzador los platos y eso que éramos 3 comensales en una mesa de 4. En fin tienen que mejorar bastante. Eso sí la cocina muy buena y el servicio también.

Llevamos un par de años viniendo a este restaurante y este año nos ha parecido carísimo. El sitio como siempre súper agradable, de eso no hay duda. Pero la comida raciones pequeñas y un precio altísimo. Por ejemplo una dorada a 60€/kg…o el salteado que era enano. Una pena pues nos gustaba mucho el sitio.

No organicen ninguna celebración en este lugar a no ser que quieran que sea un auténtico fracaso. Cubierto carísimo, comida muy escasa y de poca calidad, no había nada que estuviera rico, servicio pésimo, responsable impresentable, no hay aire acondicionado, calor sofocante.Pena por hacer de un día que iba a ser precioso y con tanta ilusión que lo había preparado una madre para una celebración de comunión, lo arruinara un sitio tan desastroso como éste. No hay derecho, no vuelvo en la vida y les aconsejo que no vayan.

Fraude total, pésimo servicio para el menú contratado. Un solo camarero para atender a 70 personas, no recomiendo ni para ir a tomar un café.Tras quejarnos reaccionaron levemente, pero nada, nos fuimos con muy malas impresiones y sin apenas comer. Habíamos contratado 8 degustaciones por persona y la mayoría apenas probó 4. Engaño total. No se me ocurriría recomendar a nadie..... Ni a mí peor enemigo

Bueno servicio, buena atención y buena comida. La decoración del lugar muy austera, aunque la ubicación en un parque lo compensa. Raciones muy pequeñas para precios caros. De ahí no más de 3 estrellas.