Posada El Solar en Ribamontán al Mar

Precioso lugar en contacto estrecho con la naturaleza. La estancia, servicio y trato con los clientes excelente. Serviciales, atentos y muy amables. El desayuno saludable con un delicioso bizcocho casero. Cama muy grande y excelente decoración.Un precioso lugar de descanso, desconexión y paz. Muy recomendable.

Lugar perfecto para descansar con tu pareja. Parece apartado pero tienes la playa cerca y otras actividades para realizar. Las habitaciones son amplias y limpias. El servicio también es bueno. Lugar acogedor, con una carta no muy extensa pero muy rica. Aparcamiento gratuito. Para volver.

Reservamos un fin de semana. El sitio se encuentra bastante bien ubicado,con unas vistas espectaculares. El trato fue exquisito,ya que íbamos por primera vez y el dueño se tomó la molestia de explicarnos todo lo que podíamos ver en un mapa, haciéndonos indicaciones etc cogíamos entradas a cabarceno ya que nos hacía el propio hostal un descuento. El tema de reservar tanto desayuno,como cena nos "disgusto" un poco ya que tienen un margen de hora muy limitado...cogimos habitación con hidromasaje la cual pagamos un suplemento de 60€ y sinceramente no estaba en las mejores condiciones, al igual que un peldaño de la habitación estaba roto y tenía un gran relieve con el cual te tropezabas. Son pequeños detalles. Pero realmente fue una estancia muy agradable, volveremos a repetir. Totalmente recomendable.

Estuvimos solamente una noche.El entorno es precioso,la casa muy bonita. Pero las exigencias que pone el dueño desde luego no corresponden con los servicios que ofrece. Llegamos a la habitación que no estaba mal,pero la sobrecama tenía unas cuantas manchas,cuando la quitamos sorprendentemente apareció una colcha toda deshilachada,y al abrir la cama dio la casualidad que no había sábana bajera solamente la funda de colchón que sinceramente no daba un aspecto pulcro ni cuidado,pedí una sábana,me la entregan disculpandose por la nueva empleada que tenían,sorpresa al ir a ponerla tenía unas manchas amarillas bastante desagradables,vuelvo a pedir una nueva,que reviso con el dueño y también con manchas. A la tercera la vencida.Como podéis comprender ya no estuvimos muy cómodos con respecto a la higiene de la cama.Sobre todo que con las exigencias monetarias que pone en todos los carteles a lo largo del hotel y las habitaciones sobre cualquier desperfecto en la ropa de cama,toallas etc,deberían ser mucho más exigentes con lo que ponen en las habitaciones.No volvería.Una pena pq el sitio es precioso y la casa con unos mínimos cuidados sería fantástica.

Un sitio muy bonito. Tiene unas vistas increíbles. Tiene mucho encanto. El interior es muy acogedor. Estuvimos una noche y todo fue estupendo. El personal es de 10. Muy majos y muy familiares. El desayuno bastante bueno (ofrecen diferentes opciones) y todo casero y muy rico. Las habitaciones muy bien. Todo limpio e higienizado. Es un sitio al que volvería sin dudarlo. Sirve para desconectar y conectar con la naturaleza. Está muy bien ubicado.

Pasamos allí la noche del viernes.Es muy bonito por fuera. La habitación era amplia, pero hacía frío pese a que tenía la calefacción puesta. Las toallas no secaban, la ventana del baño tenía una toalla en la propia ventana para impedir o la filtración de agua o lluvia.Para el precio que tiene le faltan detalles de cuidado.El desayuno es correcto. Pero empieza a las 9.30...Le hace falta una vuelta para mejorarlo. Estaba limpio y tiene parking propio.

Estuve con mi pareja una noche en la habitación 105. Es muy recomendable, habitación amplia, terraza agradable y con buenas vistas. La cama muy cómoda y la habitación muy limpia. El trato con las personas responsables del hotel fue estupendo. Cocina tradicional, y de buena calidad. Además, ofrecen varios descuentos para hacer diferentes actividades cercanas a la posada (Spa,Cabárceno....) ¡Volveremos seguro!

Fuimos el fin de semana pasado aprovechando un regalo de wonderbox, y salimos de allí muy contentos y satisfechos. El lugar tiene mucho encanto, está algo apartado y eso siempre es bueno cuando buscas desconectar y la tranquilidad. La habitación y las zonas comunes estaban muy limpias y cuidadas, y no pasamos frío en ningún momento. Además, el hombre que regenta el sitio es muy servicial, atento y dedicado, nos explicó muchas cosas curiosas del lugar y nos ofreció muchos y diversos planes para nuestra estancia, tanto en las cercanías (como la Playa de Ajo y su faro) como más "alejados" (como pudo ser ir a conocer Santander). La comida que preparan también es muy rica y casera. Se nota que lo llevan con mucho mimo y dedicación, y preocupándose en todo momento porque te lleves la mejor experiencia de allí. Sin duda, repetiremos. ¡Muchas gracias por todo!

Sitio con encanto, pero podría ofrecer mucho más.Lo más destacable positivamente fue el colchón. Es muy cómodo, por lo que ofrece un buen descanso.Para cenar, probamos la hamburguesa de ternera y estaba muy buena.Como aspectos a mejorar, hay detalles un tanto desconcertantes.Para cenar, pedimos Coca Cola, y en lugar de traernos la lata con el vaso, nos trajo la copa servida. Sin ver de dónde salió. Lo mismo con el cola cao de después. Suponemos que no era marca original, y no tiene importancia, pero estaría bien avisar antes de servirlo de esa forma.Optamos por el desayuno especial, con que quedamos bastantes saciados. Todo estaba muy rico, pero nos chocó un aspecto. Ofrecía zumo de naranja natural, y a nuestro parecer, no lo era.La habitación un poco oscura. En un primer momento, puede parecer que haga frío, pero la calefacción eléctrica calienta rápido. Eso sí, el baño queda frío.También, echamos de menos un gel y un champú, aunque sea de muestra. Solamente hay un par de toallas.El trato fue agradable y correcto. Pero es cierto que vimos a la mujer que se encargaba de la limpieza y la cocina, sin mascarilla en varias ocasiones.En resumen, entiendo que es un negocio y hay que minimizar costes y maximizar beneficios, pero el cliente se va con mejor sabor de boca si hay ciertos detalles mejor cuidados.