Solar de Bujadas en Ribamontán al Mar

Menú cerrado decidido por la dueña a su bola y para toda la mesa igual.ESO NO SE PUEDE HACER Y PRETENDER QUE SEA UNA FORMA DE TRABAJO45 euracos por una comida que en absoluto lo valía en calidad ni ejecucion (=cocktail+ bol inmenso de pasta con piña y dos salmones al centro para 6 sobre patata panadera.Pistre: Quesada con nata.) .3 €/café (Ole que bien) y vino aparte, claro. Cocina normalita, de verdad, no es por ser crítico o ir de exigente.Entorno muy bonito de jardín en casa solariega.Dueña con don de gentes, agradable.Servicio de camareria amateur a más no poder.Lo siento pero lo de comer en este sitio hay que avisarlo para que luego no llegue el mosqueo y sensación de ridículo.Yo desde luego ni vuelvo ni lo recomiendo. El precio es absolutamente desmedido

Mi experiencia a sido bastante mala , por unos garbanzos con dos colas se langostino y un mini tronco de calabacín relleno de una carne nada rica , el postre de limón que sabia a leche consensada , no nos a gustado nada . El sitio acogedor. 45€ mas vino aparte , 3€ de cafe y un Gin tonic 12€ Me parece desproporcionado. No repito.

Solo hay un primero y un segundo, si no te gusta lo que toca ese dia, te fastidias. Bueno, pues estará todo bueno... pensé erróneamente.De primero ensalada "Tailandesa" que era un perolo de pasta con taquitos de jamón york y piña.De segundo salmón seco con muchísimas patatas. Postre, una pequeña bola de nata sobre un trocito de quesada. Esto por 45 euros. Cafe y vino aparte. El café 3€, de puchero y bastante malo. Carisimo y calidad muy justita , de verdad. Avisados estais.. La dueña vino a comernos la oreja, viendo que no podiamos disimular las caras de decepción. No se preocupe, no volveré. Hay en Suesa 4 o 5 sitios mejores y mas baratos.

El jardín es muy bonito y los platos principales estaban bien hechos pero hay un desaliño general importante. En todo caso, cobrar 50€ el cubierto (sin vino) por un salmorejo común y una carrilladas guisadas también de lo más común me parece demasiado. Y los aperitivos y postre fueron bastante malos.Por otra parte, no es que no te dé factura, es que no te da ni tíquet de caja. Todo es en negro, lo que aún justifica menos el precio.

Nos animamos a ir por los buenos comentarios y si bien estoy de acuerdo en que es un entorno bonito para comer el menú me defraudó enormemente. Hemos pagado 45€ por persona por un pisto con un huevo y unos pimientos rellenos sin nada de guarnición y un postre regulero de fruta batida con nata. La bebida aparte. Sinceramente el precio es totalmente desproporcionado por lo que recibes ya que tampoco es que estuviera espectacular. No entiendo porque la mesa de al lado tenía unas carrilleras con arroz de segundo en lugar del mismo menú que nosotros. El café también es caro, 3€. Menuda decepción.

Relación calidad precio desproporcionada. El menú a 45€ no lo vale y los cafés a 3€, tampoco. Entorno bonito y tranquilo.

Como en casa. Todo precioso y riquísimo

Es un lugar maravilloso en todo sus aspectos. Me encanta.

El lugar nos decepcionó después de haber leído tan buenas opiniones y la recomendación de alguna revista. Pensábamos que la cocinera se esforzaría en diseñar un buen menú acorde a mercado, pero no fue así. El menú consistió en una crema de verduras y pimientos rellenos (no se especificaba ni sabríamos decir de qué) flotando en una salsa líquida indescriptible, mucho arroz blanco. De postre, helado de aguacate que, en mi opinión, fue la única elaboración digna de llamarse así. Precio caro teniendo en cuenta en lo que consistió el menú. La señora amable. Bonito jardín pero en algunas zonas requeriría un repaso. No creo que volvamos.