El Serbal en Santander

Vistas increibles, servicio atento, comida rica…3 circunstancias que aunadas no te lo hacen pensar, nos decantamos por menú degustación, que ha sido equilibrado y sabroso, con toques de la tierruca.

Increíble experiencia en este restaurante. Tomamos el menú degustación y nos encantó. No se le puede poner ningún pero. Mi pareja lo tomó con maridaje y no puede ser mejor la elección de los vinos. Personal muy amable. El entorno y vistas donde está es para repetir. Para finalizar nos tomamos un cóctel también increíble, realizado por el campeón de España de coctelería. Volveremos.

Esta ha sido la primera ocasión que he visitado el Restaurante El Serbal. Ha sido una experiencia muy buena para celebrar un aniversario. Elegimos el menú degustación pequeño sin maridaje (después había que conducir) y el resultado ha sido muy gratificante en todos los sentidos, excelente atención, servicio, sin tiempos muertos. Los platos muy vistosos, apetecibles y con sabores en ocasiones sorprendentes. Seguro que haces por repetir. Enhorabuena.

Nos encantó. Precioso local con unas vistas sobre el Sardinero increíbles. En servicio de restaurante top por encima de otros estrellas Michelín que he estado. Todo super cuidado. La comida genial. Optamos por el menú gastronómico y ahora solo queremos volver a probar el de degustación. Menú más tradicional con 1 entrante, 1 primero, 1 principal del pescado, 1 principal de carne y postre. Lo mejor la carne y quizás los más flojo las merluza pero en general una experiencia de 10. Muy recomendable

Sin duda para repetir, localización inmejorable, con unas vistas al mar magníficas. La atención en sala, de primera, muy profesional.Todo lo que comimos, estaba delicioso.Y una mención muy especial, para el postre de helado de Pedro Ximénez, con milhojas de pera Williams con queso azul y tallarines de hinojo, un auténtico placer para el paladar.

Una experiencia increíble. El menú de 75 euros ha sido impresionante. Los aperitivos han dejado el listón muy alto pero los entrantes no se quedaban atrás. Los segundos y los postres, buff, sin palabras. No quiero decir más porque los platos son sorpresa. El servicio impecable, amabilísimos, de diez. Y el local, con vistas a la playa y al precioso mar cantábrico.

Más que una cocina…. Es una experiencia para todos los sentidos; sabores, olores, texturas y vistas. Tomamos el menú degustación con maridaje y no decepcionó ningún pase. Todo acompañado con unas vistas a la playa inigualables y únicas. Y el equipo de sala maravilloso. Muchísimas gracias por esta experiencia para los sentidos.

Más que merecida la estrella michelín.Deliciosas mezclas de sabores en cada uno de sus platos, a destacar el aperitivo con anchoa y tudanca.El personal muy amable, formal y atento.Local elegante con preciosas vistas al mar cantábrico.Comimos el menú gastronómico pero sin duda volveremos a probar el menú degustacion, q aunque quedamos perfectamente llenos nos gustaría haber probado otros platos.Un placer.

Un acierto el cambio de ubicación del restaurante, si bien es cierto que el entorno, situado en la misma playa de El Sardinero, no debe entretener los sentidos gastronómicos que ofrecen. Un cariñoso y esperanzador aplauso para Quique Muñoz y su socio Rafael Prieto. Un estrellato bien merecido!