Danontzat en Hondarribia

Espectacular. El sitio es pequeñito, super acogedor, con mucho encanto. El servicio estupendo. Gorka, el chef, se acerca a las mesas y te explica los platos con mucho mimo y simpatía. Y qué decir de los sabores... Una explosión de sensaciones. Todo exquisito. Sin duda, una visita imprescindible si estás en Hondarribia.

¡Restaurante EXCELENTE! Desde cocina trabajan el producto a la perfección, consiguiendo una combinación de sabores brutal. También cabe destacar el buen trato de los camareros y camareras. ¡Volveremos seguro!

Todo lo que pedimos estaba bueno y bien cocinado. Los platos son típicos pero con un toque original. El servicio fue muy amable y servicial

Fuimos por su valoración alta y sin duda superó nuestras expectativas. Gorka el dueño se ve que ama su trabajo, te explica los platos con pasión. Y como el dice le tocas los pies a a San Pedro con los sabores de su cocina. Gracias por la experiencia. Un saludo de los tragones de Madrid jeje. Buen homenaje nos dimos 😀.

Espectacular pintxo (puede ser ración o plato) de txangurro con una salsa a base de naranja y whisky irlandés, también he probado los torreznos de Soria y estaban súper crunchy, muy sabroso.Lo mejor, la atención del chico, ha movido el barril para que tuviera una mejor vista, me ha contado la leyenda del primer pastel de txangurro y recomendado un vino brutal. Atención, comida y ubicación de 1500

Un gran sitioDescubierto hoy mismo !Leí hace unos días sobre elY le daban buena puntuación y fuimos a probar y todo un acierto !!Situado en el casco viejo de Hondarribia en una de las callesSubiendo pasando el ayuntamiento a mano izquierda .Desde la comida que estaba buenísimaHasta el trato de camareros que fue excepcional y muy cercanoVolveré sin duda !!Sitio pequeño con encantoRecomendable 100%Le doy 5 estrellasY por qué no hay másSi no se las daba !

Ha sido un gran descubrimiento en el casco viejo de Fuenterrabía. Sin duda, si ya conocéis la ciudad, y queréis saliros de los habituales pintxos, os lo recomendaría 100%. El sitio, por fuera parece una taberna, y por dentro es algo más moderno, algo diferente a lo tradicional. El trato es muy bueno, y te explican los platos al detalle.Tenéis que pedir el pastel de txangurro, el matrimonio, y el rabo de ternera. Hasta el final con esta elección😄

No sé lo que será comer en un estrella Michelin pero comer aquí es, como dijo Jesulin, IN CRE I BLE. Cada plato superaba al siguiente. Mejillones en tempura...sin palabras, caen como pipas. Los boquerones...imperdibles, pidelos o te arrepentirás toda tu misera vida. Tigres...madre mia la abuela no chef como sabia lo que hacía. Lo mejor para el final, chipirones con rissoto de hongos, pecado mortal. Remata el tema un arroz con leche, lo siento mamá, hasta hoy tu arroz con leche era el mejor. Trato y servicio se merece un comentario aparte, que gusto, que placer, que atención, un auténtico placer en estos tiempos. Felicidades por vuestro servicio, cocina y atención.

Excepcional experiencia gastronómica acompañados por un gran chef que transmite muy buen rollo. El menú degustación es variado y abundante, con comida creativa que combina diferentes sabores y texturas, acompañados por un buen maridaje.Si tuviera que destacar un plato me quedaría con el pastel de txangurro, con una textura suave y un sabor potente y delicioso.