Es Blanc en Blanes

La comida está buena, tardaron un poco en sentarnos en mesa, teniamos una reserva de 11 personas desde hacía 2 meses. Nos hablaban de primeras en catalán y había gente de nuestro grupo que no lo entendía porque son de otras ciudades. En nuestro caso lo entendíamos por el valenciano. Nos entregaron los menús en catalán. Menos mal que luego trajeron alguno en castellano.El local muy bonito, el problema es que no hay estores o tolditos para el sol, nos daba a algunos de cara y es incómodo comer de esa manera y a algunos nos lloraban los ojos... no queriamos comer con gafas de sol dentro del restaurante.En cuanto a la comida, nos trajeron un vasito de boniato y patata de bienvenida muy bueno, me encantó (siempre y cuando estuviese caliente. A mi pareja le tocó super frío y no estaba bueno). Los principales de todos salieron menos el mío que salió 5 minutos más tarde. Mis compañeros querían esperarme y se les enfriaba el suyo. Los principales muy bien, ración muy contundente, estabamos tan llenos que algunos platos volvieron a cocina prácticamente sin tocarlos, una lástima. En nuestro caso todos pedimos lo mismo, el arroz de cangrejo y sepia y salieron todos a la vez.El precio, no está mal porque era menú, sino la cuenta para 11 personas habría sido altísima. El menú estaba a 30€. Hicimos una cuenta de más de 350€ y no nos invitaron ni a cafés ni chupitos. Una lástima.En resumen, se come bien, la atención y rapidez regular, el precio un poco excesivo para lo que es.

Un sitio muy bonito, justo en frente del mar en pleno centro de Blanes. Decoracion muy bonita. Bastante lleno siempre, recomendable reservar. Hay dos turnos de comida, a la 1 y las 3. Hay dos menus unoa de 34 eur y otro de 40 eur. Los dos valen mucho la pena. El arroz negro esta muy bueno. Em general de los mejores restaurantes de Blanes

Buenas vistas e inmejorable ubicación para tomar una cerveza. Personal muy amable. De noche debe ser un lugar ideal para una copa con música. Volveré.

Tienen una carta muy variada que sale del estereotipo que se encuentra por la zona, un poco limitado a “paella y pescado” (estoy simplificando), por lo que es imposible que haya quien no encuentre algo que le apetezca, todo con productos de calidad. El lugar es perfecto, al lado de la playa, sobre todo en verano, que al abrir puertas y ventanas es difícil diferenciar entre interior y terraza. El servicio es muy amable y profesional. Resumen: Me encanta!!!

Un sitio muy bonito, decoración, música y ambiente top! Tienen diferentes tipos de entrantes de pescado, estilo japonés, y también tapas tradicionales con un toque fusion. Hay menos variedad de platos principales pero hay carne y hay mariscos y pescado, no necesitas más. Muy recomendable.

El sitio es espectacular, con vistas al mar preciosas. Ambiente agradable, música adecuada.Los camareros fueron muy majos en general, atentos a cualquier cosa que pedías.La comida: el pulpo está muy muy bueno y las croquetas también muy buenas. El arroz de cabrá de mar, estaba bueno pero personalmente creo que el sofrito si se pasa por la turmi estaría mejor ligado e integrado en el plato. Los trocitos del cangrejo entiendo que eran inevitables. Y el postre una.pannacota estaba muy buena.La experiencia ha sido buena.

Restaurante cuidado com unas vistas y localización muy buenas. Fuimos en el segundo turno y el servicio se notaba que estaba cansado y poco atento. Comida relación calidad-precio un poco elevada. Raciones pequeñas. Cazuela de almejas y gambas muy normalita, calamares bien y el pulpo, el parmentier, que en teoría era de patata no sabía a nada. Arroz de centollo mediocre. Tartar de salmón y steak tartar recomendables. Los postres no valen la pena, muy artificiales y malos.

Comimos el fin de semana pasado un menú de arraces con entrantes y el resultado no fué lo que esperabamos.Los entrantes escasos y nada especial, un tomate con cebolla, unas bravas, un plato de mejillones y si acaso destacar unos boquerones fritos, que no como dice el menú un plato de pescados.El arroz estaba sabroso, pero nada espectacular, lo único espectacular es su ubicación y el local que está muy bien decorado y ambientado.El servicio, no sé si porqué es temporada alta, pero nada a destacar de ellos, ni por amabilidad, ni por profesionalidad en la atención al cliente te sirven los platos y punto.

Como positivo: Tiene una ubicación inmejorable, vistas hacia el mar preciosas. Muy buena decoración interior y personal amable.Como negativo: en cuanto a la comida me ha decepcionado un poco, a mi parecer los platos tienen mucha descripción pero muy poco sabor. Tal vez haya sido el día.