Antiguo Meson en Almuñécar

Raciones súper abundantes, la atención exquisita, sobre todo la del camarero que nos atendió, un chico fuerte de barba, la chica también muy atenta. Nos recomendaron para cenar cantidades y fue perfecto.Primero nos pusieron unas tapas antes de cenar de patatas con jamón muy ricas.

Mesón con buena terraza en primera línea de la Playa de Velilla (Almuñécar). Muy ricas todas las raciones y el trato muy amable. Muy recomendable.

Está bien para tomarte algo pero la gestión es mala. Solo funciona bien una camarera joven que hay que si te puede atender genial pero sino preparate para esperar un buen rato a que te hagan caso o te cobren

Solo he desayunado todos los días que he estado en la playa pero tiene muy buena pinta la comida

Para tapear mucho precocinado barato... Empanada de tomate sin atún, croqueta de bechamel y poco más, y si pueden se saltan la tapa, como ha sido nuestro caso, incluso reclamándola. No creo que volvamos.A la respuesta del propietario aclararle que ni pusieron albóndigas ni pescado (ya nos hubiera gustado). Pusieron mini rosca, un pedacito de jamón (estaba bueno), empanadillas de tomate sin atún, croquetas de bechamel, y la tapa de aire que SÍ reclamamos sin éxito al camarero.Por otro lado, hay gente que sale a comer o a cenar o como es nuestro caso hay gente que prefiere salir de tapas y tomar muchas cervezas o vinos, cosa que creo normal en una tierra como la nuestra, que es famosa su TAPEO. Si su negocio es sólo restaurante, no entiendo por qué dan opción a mesas para tapear (es una contradicción).Y como estamos con sarcasmo, también aclaro que pregunté a uno de los camareros que tanto nos echará de menos que si ponían caña (entiéndase como vasito o copa pequeña) y nos dijo que no porque si no, no le saldría rentable poner tapa. Mejor que no diera tanta explicación y decir simplemente que no y no dejar al negocio con una imagen tan cutre, y más cobrándose a los precios que se cobran hoy en día...Y por cierto, y como somos sinceros, el vino tinto que se supone estaba a la temperatura de la vinoteca tuvimos que enfriarlo con hielo...inconcebible.

Una experiencia fantástica, un servicio excelente y una comida muy bien preparada, lo recomiendo.

Me pareció un pelín caro para la cantidad que comimos, pero estaba muy bueno todo.

Siento decir que me he llevado una gran decepción, pedimos una sombrilla, era mediodía, había otra mesa con sombrilla al lado, al parecer, según el alto camarero, hacia aire, el cual no note que se llevase una sombrilla y nos dijo que no.Ni un ápice de empatía para quedarnos a tomar algo.Así que nos fuimos!

Lo conozco hace cerca de 40 años, cuando lo llevaban Cabrera y Paco, y como siempre buen servicio y calidad.