Bodegas La Mancha en Granada

Es EL lugar pintoresco que todo turista aficionado a los lugares genuinos quiere conocer. Es muy tradicional y lleno de parroquianos, la barra es muy animada y bulliciosa. Los camareros trabajan muchísimo, a todo ritmo, muy profesionales. El vermuth, clerico y vinos que probé allí me parecieron excelentes. Las tapas están muy buenas y son variadas, hay una gran variedad de bocadillos para elegir. Un lugar encantador desde todo punto de vista !!!

Nos sorprendió el sitio,por sus ricas tapas, a buen precio y con buen trato. La tortilla muy rica, los garbanzos con callos también y los calamares en salsa tampoco desmerece. Te preguntan ellos que deseas de tapa y te explican que tienen del dia. Otro que a apuntar para la siguiente visita

Es un lugar muy típico. El servicio es rápido y las tapas que acompañan a la bebida son grandes. Es decir, caña y la tapa gratis, cosa que en muchos sitios ya no se hace. Muy simpáticos los camareros de la barra y muy buenas tapas. El BERMUT casero espectacular.

Nos la habían recomendado y fuimos. Tienen bocadillos, raciones, etc. Tomamos una caña en 2,40€, una ración de habas con jamón(a mí gusto, faltó conjugar más los sabores), tomamos una unidad de croqueta regalá por 1,65€ que hubiese estado bien si hubiese estado caliente. Quizás no fuimos a la mejor hora. No es el tipo de negocios que prefiero, pero no está mal.

Buen sitio para tomar unas tapitas. El servicio atiende rápido, y no tardan en servir la comida. Especializado en croquetas, están riquísimas, no te las pierdas. También las tapas de arroz y calamares en salsa están genial. Merece la pena también probar su vermut. Es uno de los mejores sitios donde lo puedes degustar. De lo mejor del centro de Granada relación calidad precio. Lo recomiendo.

No puedo decir que estaba mal, pero los sabores eran demasiado fuertes para mí. Inclusive me costó trabajo poder elegir algo de la carta porque todo era muy pesado. Sin embargo la comida tiene calidad. Precios no tan accesibles. El vino muy rico.

Enorme descubrimiento.Servicio amable, impecable, atento y profesional. Un verdadero gusto.Local que mantiene un ambiente añejo, con amplísima carta y tradiciones como la olla de San Antón.Bebidas con tapa incluida a elegir, tanto calientes como frías. Un espectáculo.Tienen mesitas donde poder complementar con medias raciones, bocadillos, tapas... Todo casero y a un precio espectacular.Por favor, que no cambien nada. De lo mejorcito de la ciudad.

Excelente. Tapas y raciones de gran calidad por muy buen precio. Servicio muy amable. Un sitio para no perderse.

El camarero que nos atendió se notaba que no le gustaba su trabajo.Cuando pedimos las bebidas ya nos dijo: os habéis puesto de acuerdo todos para pedir cosas diferentes? Pensamos que sería en plan coña/amigable pero con sus siguientes acciones y comentarios vimos que no.A parte de ello, aunque evidentemente no esten obligados a darnos una tapa por bebida, lo hicieron en cada mesa menos en la nuestra. El propio camarero sacó un caldo, el cual pensamos que sería la tapa, pero solo sacó uno. Después en la cuenta final, aún habiéndose equivocado, nos lo quisieron cobrar.Además, la comida no era nada del otro mundo. Compartimos una tabla caliente que llevaba un variado de comida y a parte unas morcillas. Lo mejor fueron las morcillas, lo demás nada especial.En definitiva un desastre, seguro que este local no lo volvemos a visitar.