Zuloaga 23 en Granada

Soy celíaca y estoy de viaje con mi pareja, encontramos este bar y sin pensarlo dos veces fuimos allí, me pedí la pizza, buenísima al igual que los postres, sin miedo a la contaminación cruzada, las dos chicas que nos atendieron super simpáticas y agradables. Muy acogedor.

Buen sitio para elegir opciones sin gluten (toda la carta sin gluten y sin lactosa), también tienen productos para encargar o llevar sin gluten pero siento decir que es mala la relación calidad/precio. El trato fue muy bueno y tanto la camarera como la cocinara muy amables. Sé que los productos sin gluten son caros, pero 1 ración de 8 croquetas 14€ me parece una locura.

Se come de maravilla y la camarera es muy simpática pero los precios son desorbitados para el sitio en el que está y la comida que ponen. Yo agradezco siempre tener una opción sin gluten pero no a cualquier precio. Éramos 3 adultos y dos niños pequeños. Un único plato, bebida y postre: algo más de 100 euros. Lo que más nos sorprendió, pagar 3 euros por una botella de agua (consumimos 2). Lo dicho, la comida buena pero no merece ese precio.

Muy bueno todo, comida sin gluten casera y muy agradables!

Nos hemos ido bastante desilusionados. Supongo que como la mayoría, al ver que era un local en el que servían comida 100% sin gluten hemos acudido por la seguridad que nos da eso.No obstante, tanto mi pareja como yo hemos visto bastantes carencias. Nos han servido una ensalada que, sobre el papel, parecía algo exquisito y lleno de sabores, cuando, en realidad, era queso de bote y lechuga.Nos hemos comido una pizza también que no tenía nada especial.Una cerveza y un botellín de agua.Un precio altísimo (36 euros) y para nuestra sorpresa, al ir a pagar con tarjeta, nos dicen que no es posible, que solo se puede pagar en metálico (sin IVA y sin nada).Desilusionado de no poder recomendarlo.

Muy buena atención por parte de la cocinera y camarera, que tengo entendido son madre e hija. Tan pronto yo y mi acompañante nos sentamos, nos preguntaron por nuestras intolerancias para poder adaptarse al máximo a nosotros y fueron muy atentas. Comimos unos san jacobos y croquetas de calabaza buenísimos. Recomiendo mucho el sitio.

Una maravilla para los celíacos!Calidad precio no está nada mal, los precios son un poco altos pero también lo son los productos sin gluten, Toda la carta es sin gluten y además cuentan con bastantes galletas caseras sin gluten.El trato es muy bueno, la dueña y su hija son super majas y Arya es adorable.

Encontramos el sitio en nuestro último día en Granada. Está a 10 min del centro. Toda la carta es sin gluten. La comida es exquisita. Comimos croquetas y pizza casera y nos quedamos con ganas de más. El trato del personal es fantástico y la relación calidad precio excelente. Si volvemos a Granada, repetimos seguro.

Solo vamos a decir que hemos pedido puchero a 40 grados en pleno Agosto, ¡todo buenísimo!Las camareras son muy agradables que hasta se han puesto a hablar con nosotros aconsejándonos cómo visitar la ciudad.¡Celíacos, venir! Todo, absolutamente todo, es sin gluten, tenéis 100% asegurado que no va a haber contaminación cruzada.