Chiringuito Chambao de Paco en Motril

El pescado estaba muy fresco, bien frito pero un poco salado,las almejas bien pero muy cara la. ración,por lo que pagamos sesenta euros por persona,se podría haber comido en cualquier restaurante de calidad y prestigio,contando qué compartimos los pescados y las almejas,no comimos nada más solo uno un entrecot y dos postres y éramos seis,en fin no volveremos, además hacía mucho calorAdmisión de niños: No pusieron ningún obstáculo

Teníamos reserva a las 15:30 y nos trajeron el primer plato a las 16:45. A todo el mundo le pasó lo mismo. De hecho hubo comensales que se fueron y otros les pidieron que les pusieran la comida para llevar. Un caos. Lo "gracioso" Es que cuando llame para reservar el día anterior me dijeron que les dijera si ibamos a tomar alguno de los arroces que ofrecen en la carta para empezar a marcharlo con antelación y que no tuviéramos que esperar mucho.... Pues menos mal que teníamos reservado el arroz.

Un gran restaurante a pié de una de las mejores playas de la Costa Tropical. Lo que más destaca es la calidad de sus productos de la mar, su cocina y el trato maravilloso de todo su personal atento en todo momento.Pescados y mariscos muy frescos, de la lonja de ese mismo día. Encargamos un pez de San Pedro (Gallopedro) que nos lo hicieron frito. Espectacular. De los mejores pescados que hemos probado.

El lugar magnífico, junto al tajo los barquitos...precioso. Pero la relación precio calidad fatal. Raciones-tipo tapa; minimus: ensalada tomate con aguacate, medio tomate y medio aguacate. Raciones de engaño y precios de lujo. Tenéis que mejorar.Ah!! Ni una aceituna de tapa o una patatitas crujiente mientras esperas...Digo yo.Así no.Ah!! Un poquito de amabilidad que el sitio es magnífico; pero un poquito más, un poquito más,... O no? Vosotros veréis... Tantos años y hay que ir hacia mejor o no?

Buena comida. Mala atenciónHemos ido dos veces.La primera con reserva y nos dijeron que había muchas más reservas y que no sabían si podría atendernos en el lugar más sombrío, cuando fuimos a comer había sólo dos mesas mas y las mas sombreadas no las habían montado. Es el único en la zona que tiene quisquillas ( la ración más cara de la carta) y acudimos por segunda vez por este motivo. Cuando pedimos la ración de quisquillas con una segunda cerveza nos dijeron que no había derecho a tapa. Alucinante la mala atención!

Chiringuito enclavado en la arena (cantos rodados más bien) cerca de la orilla y con buenas vistas a los acantilados de Calahonda. Comida correcta y precio también. Para repetir, de hecho ya he repetido :)

Sitio ideal para comer cerca de la playa, el arroz ciego riquísimo

El Placer de degustar una buena carta en primera línea de playa, con la gran armonía de fondo del sonido del mar!!!Trato excelente!!Muy buen servicio!!Muy buena Calidad!!!Si quieres pasar un buen día, relajarte, sin preocupaciones ni agobios, en compañía de tus familiares y/o amigos, no lo dudes!Este es el lugar!!!

Chambao con fabulosas y pintorescas vistas a la playa ideal para almorzar o cenar y seguir disfrutando con una copa de ron de la zona. Muy buena cerveza fría y en su punto de gas, las quisquillas, el pulpo, calamares y pescados de roca de esta costa están espectaculares, como en ningún sitio aunque no tienen fama. La zona está muy deshabitada fuera de temporada por lo que se fusiona un bar de pueblo en invierno con un restaurante de verano y la afluencia de cerveceros de medio día, esto puede crear cierta confusión en algunos visitantes y hay que comprenderlo. El sistema granadino de cerveza cara con tapa(?) gratis y raciones caras sigue sin convencerme. Es más versátil para el cliente y para el bar la cerveza a su precio, tapa de calidad, media y ración, lo que te permite adaptar tu consumo a tus necesidades. Veo que últimamente quieren eliminar a los cerveceros de mediodía reduciendo su espacio a un rincón y aumentando el precio de la caña para favorecer el restaurante y se equivocan porque la cerveza es lo que luego invita a sentarse a comer. Por último, el peculiar acento de Granada puede parecerle que el camarero no le habla bien, pero no es así, son muy amables y simpáticos