El Tito Migue en Lepe

Todo riquisimo, inmejorable. Pienso volver muchas veces más. El camarero que nos atendió muy amable y para las cocineras un 10, exquisito lo que pedimos.

Comimos al mediodia a base de raciones y ½ raciones. El servicio bien. La comida bien pero las raciones un poco escasa.

Para mi fue pésimo, las medias raciones eran como tapas, muy caras para el contenido. Calidad de la comida dejaba mucho que desear y sobre todo lo más importante en un negocio el trato al cliente. Nos atendió un camarero calvo, mal educado, borde y antipático, lo tenía todo, le pedimos mahonesa y desde lejos nos la tiro a la mesa, lamentable ni regalado vuelvo yo a ese bar.

Pésimo servicio. La comida regulera. Pides y tarda mucho, entre plato y plato hay media hora. Unos comiendo y otros mirando. El responsable es una persona superdesagradable. Las pocas veces que hemos ido, nos ha pasado siempre algún contratiempo. Y ya "una y no más santo tomás"Si al menos se hiciera cargo otra persona más agradable y cordial le haría un flaco favor al servicio. No lo recomiendo para nada, en la Antilla hay muchísimos más sitios mejores. No pierdan el tiempo, nunca mejor dicho...... porque tiempo es lo que se pierde de tanto que tardan en servir.

Servicio malísimo, comida escasa y poca calidad para el precio que tiene. Se salva poco de lo que pedimos. Tiempo de espera entre un plato y otro excesivo, parte de la mesa comiendo y la otra mirando. Las cantidades de los platos cambian de un martes a un domingo. Reclamando constantemente todo lo que pedíamos. Resumen: no recomendaría este bar a nadie.

Restaurante con buena calidad-precio. Buena atención de los camareros. Tiempo de servicio correcto. Las raciones que solicitamos (Choco frito, choco plancha, atún al ajillo, ensaladilla de gambas..) estaban bien . Establecimiento recomendable.

No recomendaría en absoluto este restaurante. Tanto el trato al cliente como la calidad de la comida fueron inaceptables.En primer lugar, tras un malentendido con la reserva que habíamos realizado anteriormente (nos confundimos ellos y nosotros de mesa reservada, ya que nos sentamos inicialmente en la mesa reservada de otra familia), recibimos una respuesta malsonante y ofensiva por su parte durante el malentendido, llegando a salir el coordinador del bar restaurante arremetiendo contra uno de nosotros, cito textualmente: "señora y usted por qué tiene esa cara?", en una actitud absolutamente irrespetuosa e impertinente hacia ella que padece actualmente una enfermedad.Además de todo esto, estaban absolutamente desbordados: la coordinación entre camareros era prácticamente nula, los tiempos de espera de los platos con muchísimo retraso, además de que las cartas QR no funcionaban y solamente existían un par físicas para todo el bar.En definitiva, no pongo un cero porque no se puede.

Alejado de la zona turística, frecuentado por locales, puedes encontrar calidad precio muy aceptable; muy buen pescaíto frito y posibilidad de pedir arroces por encargo. Comer bien no tiene por qué ser caro

Buen restaurante poco conocido, ambiente popular para comer muy bien y barato sin pretensiones. Con tapas, medias, y raciones, buenos pescados.