Smoix en Ciutadella de Menorca

Sitio exquisito, para 2 personas pedimos 2 entrantes, 1 plato principal por persona y 2 postres. La comida deliciosa, a destacar el ravioli de cigalas y la mousse de chocolate. Me encantó la decoración y el trato de los camareros. Sitio indispensable en Ciutadella!

Reservamos para cenar la última noche de nuestra semana en menorca, y la experiencia ha sido inigualable. Solemos salir mucho a comer fuera y no nos gusta privarnos de nada, y quizás es por eso que no nos cabe ninguna duda sobre la calidad del lugar. La cena fue un 10 desde el principio, desde el trato de los camareros y el encanto del sitio, hasta cada uno de los platos, que muy acertadamente nos recomendaron. Nada caro para lo que ofrece, un producto de calidad y una cocina muy elevada que nada tiene que envidiar a otros locales con mayor renombre y un precio muchísimo mas alto. Repetiremos sin duda si volvemos a ciutadella.

Todo muy rico. Ambiente minimalista que remete a su pasado industrial. Comida preparada por un chef y con ingredientes de temporada. Nos gustó los raviolis de cigalas (entrante). Los platos tienen tamaño bueno. Hemos llegado sin reserva y han encontrado una mesa, aunque hemos tenido que esperar. Nos gustó el detalle de no dejar el cliente sin mesa, aunque fuera sobre las 22:30h de la noche (es más recomendable hacer reserva).

Un local elegante, con toque industrial y a la vez cálido y agradable. La atención del personal, un 10. Los platos todos riquísimos. Probamos el atún, las lentejas, el ravioli y el cabracho. El postre de chocolate negro. Comimos con cerveza y agua por 89 euros los dos, así que con vino hubiera subido a 110 aprox. Precio acorde a la calidad del sitio. Para cenas especiales. Lo recomendamos 100%. Volveremos

Creí que me iba a gustar más y me quedé un poco plof, tanto por la comida que no era guau' como por el tipo de restaurante. Pedimos 5 platos y es verdad que su política es así, por el tipo de restaurante que es, pero me desesperaba comer casi de un bocado el plato y esperar al siguiente 20 minutos. Llegamos a perdir los dos platos últimos a la vez porque si no.... Tardamos en cenar 2 horas o más desde que llegamos!! Para mi que me gusta otro tipo de servicio no me gustó. La atención es buena por parte de los camareros

Si pasas por Ciutadella es parada obligatoria. Local muy tranquilo y agradable, el personal un 10 y platos riquísimos nosotros comimos el gazpacho de cereza con salpicón de gambas, ravioli de cigala, onglet de vaca salteado y cochinillo al horno. Un lugar especial muy recomendable y además un detallazo el presentar los platos divididos en dos para poder compartir.

Ha sido la peor experiencia gastronómica que hemos vivido en Menorca. Nos han sentado en una mesa en el interior pero, después de estar sentados, ha venido el dueño, encargado o chef (no sabemos lo que era) a decirnos que esa mesa era para otras personas y que cogiéramos nuestra servilleta para irnos a otra mesa. Acto que demuestra la clase del lugar. Respecto a los platos hemos pedido bastante variedad para probar lo máximo posible y después de puntuar cada uno de los platos ninguno superaba el 4. Nos encanta disfrutar de la gastronomía y en este sitio nos hemos decepcionado mucho. Deja mucho que desear. No volveremos.

Teníamos mesa a las 22:30 y llegamos a las 22:15. La chica nos dijo que la dueña nos dijo que teníamos que esperar que la mesa en la terraza estaba para las 22:30. Hasta ahí perfecto. Pero le preguntamos si podíamos tomar algo antes y nos dijo que no. Tenía una mesa alta muy grande con sitio y varias mesas sin comensales cenando y que cuyas mesas alguna ni se llenaron en el intervalo de tiempo que duro nuestra estancia en el restaurante. Con lo cual salimos a la calle y como tampoco había cerca ningún bar y tan solo quedaban ya menos de un cuarto de hora tuvimos que estar esperando en la calle. Creo que deberían de tener un poco más de consideración.

No me gustó nada. Esperaba mucho más.El tartar de atún mal cortado e insípido, el ravioli de cigala bueno de sabor pero no habían quitado el intestino a la cigala y todo el ravioli crujía, además me encontré el hilillo negro en el relleno. No me parece aceptable en un restaurante así. El cordero con yogurt muy bueno de sabor, pero me encontré un pelo de gamba o cigala en la salsa, si llego a ser alérgica al marisco...El servicio no pudo ser peor, toda la cena persiguiendo a los camareros para poder beber algo e insistiendo hasta 3 veces para la bebida.No volvería ni lo recomiendo