Restaurant Pou d'es Lleó en Santa Eulària des Riu

Sitio muy agradable. También fuimos por recomendación de Roby. La paella de marisco impresionante, y el combo de marisco también muy bueno. Los postres también a la altura, la tarta de queso y el sorbete de limón. Servicio muy rápido y el trato cercano. El licor de hierbas que hace la madre espectacular.De los mejores restaurantes en los que hemos comido en Ibiza. Para repetir sin duda alguna.

Es muy caro, y se come muy bien. Fuimos a probar el bullit de peix; íbamos 4 y pedimos para 3 (y con 2 hubiese sido suficiente). Estaba muy bueno, con pescado de calidad, a 36 € por ración, más 12 por echar arroz a la persona adicional (gesto que nos pareció feo).Los postres también estupendos.Es un local familiar, decorado de forma tradicional y con una terraza desde la que se ve el mar un poco.

Fuimos a comer bullit de peix nada más llegar a Ibiza, y dejó el listón muy alto. El arroz caldoso con sabor muy intenso, y la greixonera que tomamos para postre bien especiada. Para beber pedimos sangría con cava, estaba muy rica y además nos la prepararon en la mesa. Nos gustó tanto el restaurante que repetimos para probar el arroz negro, cremoso y sabroso también. Un sitio para volver.

Fuimos a comer y la calidad del producto es muy buena. Pero en los postres se disparan, dos trozos de sandía pequeños casi 6€. Es lo único negativo.Llevo años comiendo en ese restaurante.Lea falta ser un poco más sonrientes

Restaurante tradicional Ibicenco con salón y terraza, muy acogedora, cerca de Tagomago. Acudimos allí por recomendación de unos amigos y no defraudó. Pedimos mejillones al vino y arroz de bogavante (viene catalogado como paella pero es arroz meloso en verdad), ambos platos excelentes. Como buen Valenciano este detalle no podía faltar en mi reseña. Pedimos postres y café.Con bebida finalmente el precio fue de 110e aproximadamente y el servicio fue atento.Repetiremos.

Llegamos a comer a las 13.30, con la comida encargada del día anterior (bullit de peix) ya que te preguntan si sabes lo que vas a querer comer.Después de esperar 1h por la comida, que estaba correcta pero sin más, eran las 15.45 y aún no habíamos sido capaces de pedir el postre, ni nadie vino a interesarse por que tal estaba todo o si queríamos un postre, agua o cualquier tipo de cosa.Después de levantarme a pedirle la cuenta a una camarera y volver a ser ignorada durante 15 minutos decidí asomarme al reservado que tienen para los camareros y pedir que me cobrasen que ya no podíamos esperar más. Desde luego lo peor de esto no es el estar apurados y no llegar a más, lo peor es después de decirlo de buenas maneras recibir malas miradas y ni un triste perdón.Desde luego ni volveré ni lo recomendaré, mi tiempo vale lo mismo que el vuestro.

Un imprescindible si quieres probar el Bullit de peix auténtico y a buen precio. El trato de 12 y la terraza con mucho encanto en plena naturaleza. Un ambiente muy familiar y auténtico. Hay que ir con apetito porque este plato es contundente. Tienen, para finalizar, una carta de postres caseros extraordinaria. Nos atendió una chica gallega extraordinaria, una gran profesional, muy cercana y amable. Fuimos a comer a última hora para estar más tranquilos y fue un acierto.Por cierto, si os gusta el alioli este es el mejor, casero totalmente.Después de comer os recomendamos un paseo por la ruta que hay justo saliendo a la izquierda y disfrutar de un baño solitario en aguas cristalinas.

Hemos repetido en este restaurante. Ponen un Combo de marisco delicioso y enorme (es para 2, pero comimos 3). Es un menú que incluye la sangría de cava que no te acabas y el postre. Recomendado 100%. Y la camareras son muy simpáticas y agradables.Aparcamiento: Tormenta aparcamiento propio

El bullit de peix estaba simplemente espectacular. El arroz caldoso de primero, el mejor que he comido. Visita obligada si os gusta comer.