Celler Sa Sini en Santa María del Camí

Excelente celler. Muy buena experiencia, la comida estaba deliciosa y el trato del personal muy amable. Sin duda lo recomiendo al 100%❤️ No dudéis en probar las croquetas y sus maravillosas tartas!! Nos vemos pronto!!

Nos solía gustar mucho comer aquí e íbamos con frecuencia, pero hemos notado como la comida ha ido perdiendo calidad con el tiempo.Hace unos días fuimos a cenar un grupo de 8 personas habiendo reservado mesa. Tardaron más tiempo en servir 3 de los platos y a mi me sirvieron una pizza de aspecto lamentable, pequeña, con una masa extremadamente fina y cruda, sin nisiquiera orégano.El camarero bastante atento y agradable. Nos invitaron a chupitos, supongo que en compensación.

Somos un grupo de seis personas y estuvimos cenando ayer. El restaurante es muy acogedor, la chimenea encendida y el recibimiento de los empleados me dejaron listo para disfrutar de una magnifica velada. Pedimos una picada de pan, aceitunas, all i oli, croquetas y caracoles. Todo exquisito. Luego pedimos lomo con tumbet (para mí la carne insípida y el tumbet frío), entrecot a la pimienta (bien), arroz brut (buenísimo) y sepia a la plancha (buenísima). De postres tarta de merengue (a las tres personas que lo probamos no nos gustó para nada, muy vistosa pero nada más), tarta de chocolate (muy rica). Agua, refrescos, café y un chupito. El local limpio y acogedor. Los camareros encantadores pero nos tocó la mesa uno, algo apartada, y si queríamos algo teníamos que esperar mucho. Tendremos que volver para probar otras cosas a ver si acertamos.

Muy bueno! Nunca falla, laComida está muy bien, los postres deliciosos, el personal muy amable.

Lugar indispensable visitar, si quieres probar la comida típica mallorquina, el precio es ajustado y la calidad, es muy buena

Nos ha gustado mucho, los precios están bien,no abusan,la comida muy buena,el personal muy amable,unos postres de escándalo, no es la primera vez que vamos y tampoco será la última

Raciones abundantes, buena presentación y tartas de postre exquisitas, recomendable. Por poner alguna pega, me hablaban en mallorquín y no entendía ni papa

Increíble experiencia, todo de primera. Pedimos rosales de bacalao, las croquetas mixtas y un frito de mariscos! La única lastima fue que nos llenamos y no pudimos seguir comiendo, por lo que nos quedamos con ganas de probar la sopa mallorquina. Eso sí...no nos íbamos a perder el postre, alucinantes y muy variados.

Lo mejor es el servicio. Unos camareros súper atentos y muy agradables te estarán esperando siempre con una sonrisa. Platos típicos mallorquines, raciones grandes y a un precio razonable. Si acudes no te olvides de probar su excepcional selección de tartas, una de las mejores, más completas y más reconocidas del país. El café es el colofón perfecto a toda buena comida. Y aquí es también excepcional.