Gran Terraza Lolita Pluma en Las Palmas de Gran Canaria

Hemos comido 3 platos, todo bien, rico y abundante, y no me lo esperaba. Caímos allí por casualidad, comimos bien, tiempos buenos y servicio majete. Comimos ensalada, huevos rotos, y el codillo rico y abundante.

No está mal de precio. Atención rápida. Hay varias mesas en la terraza por lo que es raro que se llene. El café "Borbone" está delicioso y la forma de las tazas me encantó.

Buenas carta, precios normales, buena ubicación y personal amable y atento. Repetiré y recomiendo.

Por precio, calidad y localización le doy las cinco estrellas. Camareros rápidos y atentos. La comida es de buena calidad y en cantidad.

Lo conocía de antes pero esta vez el servicio de camarer@s ha sido malo.La ubicación es perfecta. He estado varias veces, otros años y con otr@s camarer@s y hay que decir que la atención de 2 de l@s camarer@s dejaba mucho que desear. Me he tenido que levantar a la barra a pedir que nos atendieran, después de unos 10min de espera, viendo que atendían antes a personas que habían llegado más tarde.Sin mas, me costara volver.Perdón, esta reseña es para Gran terraza Lolita Pluma.

No suelo ir muchas veces a esta terraza,pero en el tiempo la conozco desde su inicio conocía a su primer dueño, pero en el transcurso del tiempo lo que me sorprende es que en el Parque Santa Catalina centro neurálgico de terrazas,Turistas y Canarios un negocio que trabaja considerable mente como para permitirse comprar un mobiliario actualizado y decente para todos,mantenga este tipo de sillas y mesas deterioradas en el tiempo y tan obsoletas que no deberían estar en ninguna terraza en estos tiempos y sobre todo donde te sientas a consumir y como consecuencia dejar tu dinero esperando un buen servicio del cual no me quejo. Esta reseña trata de que los negocios tienen que renovarse, es una cuestión de mejora y actualización por derecho para todos los consumidores y beneficios para el negocio sea cual sea .

Me he sentido muy agusto, además ya de por sí el nombre tiene mucha historia en el parque de Santa Catalina. Lolita Pluma fue una señora real, bohemia, que adoraba a gatos y perros. Tiene una escultura en el parque. Y en la terraza tienen un cuadro de ella, que me ha gustado ver.La verdad es que habíamos elegido comer en un restaurante que estaba cerrado, Casa Fataga, al que llamamos para reservar y que no nos cogían el teléfono. Dejamos un mensaje, sin respuesta. Cuando fuimos a las 15'30 Casa Fataga estaba cerrado, no sabemos si por vacaciones o por lo que sea. En Internet decían abierto hasta las 17.00 h y en la puerta no indicaban nada.A última hora, hemos elegido, por proximidad y en la misma plaza esta terraza. Hemos probado queso frito, croquetas variadas, pescado a la plancha con papas arrugas y mojo y bistec con patatas fritas y ensalada. Buena presentación, todo rico. Un sitio al que perfectamente podría volver, si siguiese en Las Palmas.

Pedí el ticket de caja y no me lo dieron porque según la señora de la barra, el ticket no sale si cobran antes. Deben dar la cuenta en papel. Además el ambiente entre trabajadores no nos gustó.

He ido en varias ocasiones para celebraciones en días señalados.La comida es exquisita, tiene buen precio, buena atención al cliente.. Lo único que cambiaría serían las mesas, si van a comer y piden para picar las mesas terminan haciéndose pequeñas porque son chiquititas y los platos muy grandes..Alguna vez se han quedado los camareros esperando de pie a que les hagamos hueco en la mesa y eso es poco profesional.. Por todo lo demás, más que recomendado. ¡Seguiré yendo!