Mad Bread en Las Palmas de Gran Canaria

El camarero que nos ha atendido fue muy antipático, de hecho no nos levantamos por educación, pareciera que no tuviese ganas de trabajar, muy entendiblen que tenga un 3,6 no volveremos MÁS.

No tenían de nada, ni sabían de que estaban compuestos los platos. Con razón estaba vacío.Me pedí una tempura de verduras, cuando llegue a casa la vomité entera. Los platos dejaban mucho que desear, era todo precocinado y nos sirvieron los platos fríos.Económico, pero penoso. Lo barato sale caro.El café era lo único que merecía la pena.

Es sitio es diferente y moderno. Tienen buen café y bastante variedad en dulces y salados. El trato del personal es amable y cercano. A todo esto le sumaremos que puedes tomarte un cafecito en primera linea de playa admirando nuestra bonita Playa de Las Canteras y a buen precio. Si estás en Las Palmas por la zona del Puerto no dejes de visitar éste sitio porque es muy recomendable.

La experiencia no fue demasiado buena, a pesar de que el lugar estaba bastante vacío, el camarero no se paraba a atendernos, no dejaba que explicaramos lo que queríamos así que continuamente le teníamos que pedir cosas. Un plato combinado de 9'5€ tenía dos nuggets grandes, unas cuantas papas fritas puestas y lo que parecía una ensalada.Se equivocaron en uno de los platos combinados, y para evitar que tirasen el plato y que tardasen en cocinar el que queríamos le dijimos que simplemente del plato original queríamos el lomo, que el resto no importaba, por si solo querían traernos el lomo. Nos dijeron que si, y el camarero pretendía cobrarnos un suplemento.La pechuga empanada (que es lo que se ve en la foto) realmente era un nuggets. Finalmente, los calamares estaban buenos, aunque realmente eran bastante caros para los que traían, una ración con cuatro o 5 calamares, 16€Tenían una pizarra publicitaria en la entrada con un menú de 12'5€ con primer plato, segundo plato y café. Al preguntarle por el mismo,nos dice que eso no era ese día sino otro. Tendrían que haberlo quitado, ya que nos sentamos y pedimos bebidas por ese cartel, para luego acabar comiendo menos y medio mal.Aparcamiento: El aparcamiento es complicado, por la propia zona en la que está el restaurante.Acceso para sillas de ruedas: Esta en el propio paseo de las canteras, así que no tienen problema para las sillas de ruedas.

Mala atencion. Llegas y la camarera no te dice ni hola, pedimos dos zumos y no me da ni vaso, le pido un vaso y me da uno de plastico, lamentable. No lo recomiendo

Atención muy rápida..El camarero muy atento...Sitio frente a la playa..Lo recomiendo..

Atención pésima. El camarero no se entera ni de lo que tiene en carta. El frappe de lo peorcito que he probado en mucho tiempo. No repetiría sin duda.

Café muy rico, igual que la trenza de manzana y chocolate, totalmente recomendable

1 sándwich mixto, el color del jamón dejaba mucho que desear. El aspecto en general, no era bueno. Pasado por la plancha sin ganas.1 tostadas con mantequilla = media baguette recalentada (se podía ver a través del pan).2 Cafés con leche, que dejamos casi enteros.Todo esto servido en unas bandejas de cartón con servilleta encima, presentación CERO.Aún así hemos pagado 8 euros.Lo único que me ha gustado es la ubicación y las vistas, y teniendo en cuenta que tienen bastante competencia alrededor, no vuelvo.