Restaurante Grill Aeroclub de Gran Canaria en San Bartolomé de Tirajana

Buen grill. Los solomillos y chulotenes son muy sabrosos. También los calamares y el pulpo (muy tiernos) si no quieres carne. Obviamente, no recomiendo para veganos o vegetarianos. Precio económico y si has pagado los 15 euros de su piscina, te deducen 11 de la cuenta del restaurante. La piscina abre de 11h a 18h.

Restaurante súper grande como podéis apreciar en las fotos, una piscina estupenda y el trato muy bueno. La comida a la altura del sitio. Si les sirvió la información no dejen de darle a 👍

Son una maravilla el trato desde el señor del aparcamiento hasta el dueño son una maravilla .buenas comidas bufffff y tanto y el ratito en la piscina la verdad que un 100 .enhorabuena son muy grande un saludo equipaso llevo años yendo y cada ves mejor

Emblemático restaurante en la zona sur de Gran Canaria.A destacar el buen servicio ofrecido por los simpáticos camareros-as.Sin lugar a dudas uno de sus mejores platos es la parrillada de carne.

Calidad precio y muy buen servicio, un sitio ideal donde degustar buena comida✨

La comida muy buena, raciones abundantes y el precio esta muy bien.

Muy recomendable para pasar un dia de relax,La piscina está renovado en Enero y ahora se hace pie en toda ella, mucho más cómoda, las hamacas también son nuevas, al igual que el césped. La comida del restaurante como siempre estupenda. La profesionalidad de todo su personal y amabilidad.

Restaurante muy amplio, perfecto para realizar celebraciones. La carta es bastante variada y la relación calidad-precio super ajustada.Si vas el fin de semana casi mejor pedir reserva, porque como tiene una gran piscina para pasar el día suele estar muy concurrido.

Restaurante ubicado justo al lado de las instalaciones del Aeroclub, en el sur de Gran Canaria. Nuestra visita fue un Domingo, Día de la Madre, por lo que he de decir de antemano que posiblemente el servicio se vio afectado ante la enorme afluencia de personas de ese día. De hecho, tuvimos que esperar por mesa más de hora y media. Dicho esto, el local es amplio y la estancia es agradable. El servicio era atento, e intentaban atender lo mejor posible pese a la cantidad de gente que había en ese momento. La comida estaba bien, raciones correctas. Mi entrecot era una pieza de buen tamaño, bastante sabrosa y sin demasiada fibra. Los platos del resto de personas con las que fui, según sus opiniones, estaban bastante aceptables. Los postres que pudimos degustar, en este caso, mousse de gofio y una tarta de maracuyá, estaban muy ricos. En conclusión, experiencia positiva en general. No es un restaurante que te deslumbrará, pero cumple su cometido y es más que correcto. Como añadido, hay una piscina anexa para disfrutar de un día soleado. Aunque hay que pagarla aparte, independientemente de que vayas a almorzar en el restaurante, no deja de ser un plus para pasar una jornada diferente.