La Gabarra De Salinetas Sl en Telde

Amplio centro,junto a la playa de Salinetas, con distintos ambientes que le convierte en un restaurante de notables posibilidades, seguido por cientos de usuarios.Calidad y precios asequibles buen servicio,y lugar con muchas posibilidades. Una auténtica novedad.

Comimos ensaladilla, buenísima, con buena presentación. Papas arrugadas con mojo exquisito con un sabor muy rico... Fideuá, espectacular, con mucho marisco y los fideos en su punto. Carne de cabra y papas. La carne se deshacía en el plato de lo tierna que estaba. Muy buen trabajo en la cocina 👌. Las cervezas servidas en jarras heladas.buenisimas!El dueño, Antonio, muy amable y atento.Se preocupó personalmente por cada cliente.Me sorprendió lo bien que gestionaron el restaurante los camareros en horas punta. Especialmente el camarero Adrián, fue muy amable y atento, gran profesional!Restaurante en un lugar tranquilo frente al mar en la playa de Salinetas. Restaurante muy limpio (hasta los baños).Precios muy buenos para la cantidad y calidad de la comida.100% recomendable!!!Volveremos.Muchísimas gracias chic@s 😍

No lo recomiendo por varias razones. El plan era un encuentro entre antiguas compañeras de trabajo, nos apetecía pasar un rato agradable y nos habían recomendado este sitio. Desde el comienzo al final:- Llamamos varias veces para reservar, nos decían que no había problema y al llegar no estaba la mesa reservada.- Al pedir las bebidas, la camarera se confundió en varias de ellas y además nos trajeron la botella de vino abierta (se suele abrir delante del cliente).- Pedimos ensalada templada y nos trajeron una mixta sin dar explicaciones. Al preguntarle, nos dice entre bromas que no hay, que esa es la que tienen y se marcha, sin dar más opciones.- Pedimos una tabla de queso y nos traen un plato con un tipo de queso.- Además, empiezan a recoger la mesa cuando aún quedaba algo de comida en algunos platos, al decirle que lo dejara, nos mira de malos modos. Y además nos pedía que nos apartáramos de la mesa para ella poder recoger.- Había un concierto con el volumen muy alto por lo que costaba mantener una conversación.Esto es lo principal, así como precio elevado para la calidad y servicio. Un sitio muy desaprovechado.

Este sitio siempre me ha gustado. Tiene un ambiente super familiar y relajado y eso no ha cambiado. El motivo por el que le doy 3 estrellas es el precio. Los precios han subido una barbaridad. Entiendo que los precios han subido en todos lados pero esto es desproporcionado. El otro día pedí media de croquetas de pollo y me pusieron un plato con 10 papas fritas y 4 croquetas pequeñas y me cobraron 5€.Ya no vuelvo porque no me vale la pena la calidad y el tamaño de las porciones por el dinero que vale.

No creo que nadie espere gran cosa de la comida de este restaurante, habida cuenta, es un restaurante para salir del paso. Lo que nadie espera es que una empleada (mayor, rubia de pelo corto), con muy mal carácter, salga a darte un grito por ocupar una mesa que previamente te había asignado un camarero, en fin, cuestión de educación y saber estar.

A los mesoneros hay que buscarlos. No atienden las mesas y andan como perdidos. Si pides algo prepárate porque van a tardar.Pedí unas papas arrugadas y me las llevaron frías. La comida le doy una valoración baja porque no es gran cosa, cuesta más de lo que realmente es.Eso sí el restaurante está limpio.

Buen servicio, comida muy rica y bien presentada y buenos precios, el único aspecto negativo son los 4 vecinos que se tiran un hora con una cerveza dando gritos y cargándose el ambiente de la terraza.

Buen lugar a pie de playa tranquila.Comida para picotear con amigos . Tortilla de patatas y gambas al ajillo excelente.

Hay algunos platos que están siempre buenos, como la ensaladilla o el atún en adobo. Las croquetas y la tortilla también bien.Los calamares, algunos días buenos y otros malos.Los postres, bien.Magnífica ubicación. Los camareros están poco atentos y suelen funcionar muy lento.