La Taberna de Miguel en Sahagún

Menú del día a 10€. 4 primeros y 4 segundos con postre . Muy buena relación calidad precio. El estofado de ternera espectacular. Camarero muy atento y rápidos en el servicio.

Acabamos en este sitio y fue un acierto. A pesar de que estaban un tanto desbordados, lograron hacernos un hueco y la comida fue una delicia, especialmente la ternera guisada. Una taberna económica y muy agradable.

Un menú por 10 euros para reventar y todo muy bueno. Podía elegir entre cuatro primeros y cuatro segundos y una buena variedad de postres. Las lentejas riquísimas y en pollo con patatas también muy bueno. De beber una botella de agua de litro. Y qué decir de las natillas. Muy buena atención. ¿Se puede pedir más?

El peor restaurante en el que he comidoMenú de precio desproporcionado en relación a la calidad y cantidad que ofrecenNo Dan más opción que comer menú a 18 euros y de pena, vergonzosoEn fin, para olvidar y no volver. Por dios que no se puede tomar el pelo a la gente

Una grata sorpresa. El bacalao al ajo arriero buenisimo.

El menú del día muy bueno y variado con opciones de verdura, pasta, legumbres y ensalada de primero y diferentes platos de carne y pescado. 10 euros con raciones grandes.El personal muy amable, entre los postres que nos ofrecieron no había fruta pero pregunté y me dieron varias opciones.

Sitio bonito y tranquilo en plena plaza mayor de Sahagún. Entre semana disponen de un menú del día, con cuatro primeros y cuatro segundos (a elegir uno de cada), postre, pan y bebida (agua o vino), por 10€. Buena terraza bajo los soportales. Para repetir.

Nos sentamos en una mesa de la terraza, en los soportales, con la idea de comer. Nos dicen que fuera no sirven comidas, a pesar de que cuando nos fuimos había gente COMIENDO FUERA. Pedimos la carta porque ya habíamos estado más veces y las raciones son más que decentes. Casualmente HOY NO HABIA RACIONES, solo menú del día. Cuatro primeros, cuatro segundos y cuatro postres a elegir. Sin ser nada del otro mundo, con pan y agua 10€. Los camareros lentisimos, la cocina también. Creo que al vernos disfrazados en plan medieval pensaron que éramos de la organización sin saber que somos del pueblo de al lado. Gracias a la poca atención, un sitio para no volver jamás.

Servicio rápido y terraza en la plaza. La carne asada esta muy buena y las patatas fritas no son congeladas detalle que se valora bastante.