Cuentan Los escritos que aun hoy nos cuentan que, de este lado del triángulo imaginario que dividía la plaza Cervantes en dosy formabA el rectángulo que hoy alberga el mercado cervantino, su plaza y sus cosas, junto a una manzana o cuadra de la Plaza de San Diego de Alcalá, es cuando se empezó a construir hace tiempo el hotel Bedel pero no lo que vemos, sino una de las casi 20 manzanas en las que se dividió la Ciudad Universitaria.Hasta 18 manzanas dieron sentido a aquella idea que en 1998 materializó la Unesco con el nombramiento.La Sociedad de Condueños gran responsabilidad tuvo en ello......Nos cuentan esas gentes del siglo XX, que: ahora pasea o por un día conocen que si, la Uuniversida Complutense se llama así, es por la Vieja Compluto.desde el lado sUr-este del hotel, un arco voladizo, hoy dibujado en el suelo, en la calle que más rápido nos lleva a la Plaza Cervantes (Paisano Ilustre)En este enorme rectángulo estaba la línea o maRca jurisdicional que usaba la parte universitaria frente, siempre, a la del ayuntamiento, para ver las cosas de la plaza del mercado, hasta los festejos taurinos que hoy se celebran en la joven Estudiantina, conciertos de antaño y como no, venta de ganado.Universidad y Ayuntamiento o autoridades municipales, las de la iglesia siempre estaban presentes, andaban casi siempre a la gresca ambas por vete tu a saber que dimes y diretes o meneseteres :)ErAn todo eventos de los de antes en los que los disfraces de hoy, durante el mercado Cervantino, eran algunas de las prendas del Ayer con las que empeñamos la diversión de hoy. Semanas en las que Alcalá es la del siglo XXI pero huele a XVI o XVII.Muchas veces,o solo cuando viajamos, nos abrigamos de recuerdos que duran igual o menos que los sueños que nos conducen a seguir dando pasos siguiendo las huellas de Cervantes, Isabel Católica, Catalina de Aragón, Cisneros, etc. No se podría entender esta ciudad sin toda esta gente.El tiempo pasó y pasó y hasta el barómetro parado del edificio de El Casino, otro edificio contíguo, pasando por las cadenas que indicaban a donde los estudiantes "mandaban" por ser límite jurisdicional, hasta incluso, donde los mayores ediles veían a la ciudadanía, como indicaban los protocolos de la época,.esa Alcalá sigue existiendo.A un lado u otro donde ya se empieza a verse más o menos igual, por su peatonalización, la añeja Alcalá, e inclusive donde llegue la imaginación, siempre se ha dado más a la escritura sin descartar habladurías con las que llenar páginas de grandes literatos.En la fachada del hotel el Bedel hay una buena relación de ganadores siempre que los Reyes Otorgan el premio....y así... pasando el tiempo, los estudiantes o gente más ilustre y anónima, se fija en la construcción o el conjunto de árboles.Cierto es que hoy en día no hay parangón porque suenan entre las ramas colonias de cotorras argentinas pero si que hay crocoteos de cigüeñas y voces o pasos de viandantes.Y con todo o nada menos, entre las mismas letras pero con diferentes grafías, las mimas palabras pero en diferente momentos, El Bedel, tuvo tiempo de hacer su función de informar a estudiantes de notas, estos de recibir sus diferentes nombramientos y hasta de, como se diría siglos después, de comerse marrones de estudiantes a los que el tiempo hizo viajar hasta sitios que de todos, nunca sabremos.