Tinglado Oyster Bar en Boadilla del Monte

Visita obligada 🎖️🎖️🎖️🎖️🎖️Cada vez que viajamos a Madrid, intentamos escaparnospara sentir la experiencia Tinglado.Recomienfo LA ENSALADILLA DE MI MADRE, para mi es de primera división, luego un plato que parece sencillo pero no lo es el WOK DE POLLO DE CORRAL Y VERDURITAS, “un espectáculo”, luego AGUACATE A LA BRASA CON TARTAR DE SALMÓN, muy bueno, los CHIPIRONCITOS A LA ANDALUZA CON HUEVO FRITO Y PUNTILLA DESIERTO DE FOIE, ya me quería morir, con ese rebozado tan crujiente espectacular.Y ya si queréis que la dieta vaya por el aire, os recomiendo la TARTA DE QUESO CALIENTE, para mi que me gusta mucho la tarta de queso creo que es de los mejores que me he comido,En resumen fenomenal.Vuelvo a recordar que es de los pocos restaurantes que te ponen la cerveza con la cubitera de hielos.

Sitio para comer raciones en un restaurante con música y bonita decoración. El servicio amable. Pedimos unos chipironcitos con huevo frito y puntilla y aguacate a la brasa con tartar de salmón, ambos muy buenos. Después un saam de pulpo con palomita de kimchi y unos dumplings fritos de gamba roja, estos dos algo mas flojos. También pedimos un wok de pollo y verduritas de corral que no nos gustó. Las raciones quizás un poco escasas para su precio. De postre su tarta de queso si fue un rotundo acierto. Quizás fallamos en los platos elegidos pues vimos salir algunos platos de carne que tenían buena pinta. Le daremos una segunda oportunidad.

El restaurante está bien planteado y muy bien organizado con un personal bastante profesional. La decoración muy acogedora. La carta es breve pero buena y armonizada, con género de calidad. Nosotros hemos ido a cenar y hemos estado muy a gusto. Primero cenamos dentro pero luego tuvimos la oportunidad de tomar una copa en la terraza. Muy buena la experiencia. La tarta de queso espectacular.

Siempre tengo cierto recelo a los restaurantes de grandes grupos, porque por lo general miman menos tanto el servicio como lo que sirven. Pero en este caso debo decir que cuando vamos al Tinglado es un acierto seguro. También es cierto que casi siempre vamos fuera de las horas punta, porque si tienen algo bueno es que la cocina no cierra, y nos permite comer o cenar en horarios poco habituales y donde el restaurante está menos lleno. Con lo que no puedo hablar de retrasos ni nada, porque los hemos sufrido muy poco.Me gusta la carta, y de lo que hemos probado, me ha gustado todo. Además puedes comer mientras te tomas un coctel, que si tienes la suerte de que te lo prepare Marco, ya rematas.Para comer, cenar, picar algo a cualquier hora, o simplemente para ir a tomar algo, es un acierto, y en Boadilla que tampoco tiene tanta oferta como Madrid, más. El personal es bastante profesional y tratan de estar atentos. Aunque es cierto que es muy grande y si está muy lleno puede ser algo más caótico. El lugar es muy agradable lleno de plantas y una decoración y música agradables.Muy recomendables las ostras, la burrata con salmón, el saam de pulpo, y la burguer con "patatas" de boniato.

Local estupendo para ir con amigos. Teniendo en cuenta el tipo de comida y de local, tiene una relación calidad-precio buenísima. Además, el personal es muy profesional y amable, cosa difícil de conseguir en los tiempos que corren.De comer pedimos: ensaladilla (algo plana de sabor), burrata con tartar de salmón (muy bueno, pero de nuevo se echa en falta algo más de potencia de sabor), croquetas de jamón (muy buenas), chipironcitos con huevo frito (buenísimos), saam de pulpo (excelente), tartar de atún rojo (buena calidad, pero de nuevo falta realzar el sabor), pollo picantón (muy bueno), y tarta de queso (esta vez nos defraudó, no salió nada buena).

La primera vez que fui me llevé una mejor impresión para ser sincero. Precio elevado para la calidad/cantidad de los platos. El pulpo a la brasa llegó frío, y la carne "madurada" sin más... la bodega que tienen es escasa y mejorable. Eso sí, y por eso las 3 estrellas, es la mejor tarta de queso que he probado nunca.

Muy bien decorado, atendido rápido y elegante y, sobre todo, la comida muy rica y de calidad. Además son rápidos, lo que es de agradecer. No le pongo la quinta estrella porque se nos ha ido de precio un poco para ser tres personas y comer sin vino.

Buen sitio para comer, tomar algo o cenar en Boadilla del Monte. Con una carta sencilla pero con mucha variedad de platos, perfectos para combinar y compartir. Además es un sitio con una decoración muy agradable, con terraza. Con mucho jaleillo del que mola ya que suele estar lleno.

Fue una visita muy express, pero el ambiente está muy bien y el servicio es correcto. Simplemente no le doy 5 estrellas porque me parece un pelin caro para la comida que ofrecen. Esta todo muy bueno, simplemente creo que de precio está un poco por encima. Las gyozas estaban muy ricas, pero que estén fritas hace que no absorba todo el caldo y es una pena porque está buenísimo!