Sidreria El Pintxito en Getafe

Pedimos croquetas de jamón y tempura de verdura. Tardaron 45 minutos en servirnos. Las croquetas estaban frías por dentro y templadas por fuera, y la tempura rezumaba grasa (la dejamos a medias). El camarero nos dijo que no sabían escanciar la sidra (en una sidrería). Nos invitaron a las croquetas por el retraso. No volveremos.

Raciones justas pero muy bien ejecutadas. Muy recomendable. Zelanda servicio muy atento..

Producto fresco, raciones ricas y buena atención. Para repetir, aunque es un poco carete.

Una lotería, lo mismo te ponen un plato muy rico como algo que debería de estar en la basura. Si te gusta el riesgo, sin duda es tu sitio. El personal fue amable y atento, pero la cocina, como comento, es la ruleta de la suerte, no se debe servir productos que no valen un duro y cobrarlos como si fueran de primera calidad.

La comida excelente y el trato exquisito,salvo por un camarero que se tomó más confianzas de las debidas.Increible primera cena fuera con la mujer que amo♥️

Trato agradable con buena atención y unos platos de 10! Recomendaría a todo el mundo acudir, los camareros fueron súper atentos

Estuvimos un día para comer y no estuvo mal, pero después de ir hoy a cenar no repetiremos. La relación calidad/cantidad/precio no compensa (más de 50€ por 3 raciones, 3 bebidas y pan), la comida estaba bien en general, pero ni la cantidad, ni la eternidad que tardaron en servir, ni las numerosas equivocaciones con los platos compensan.

Fatal: los mejillones sin limpiar de "las barbas" y muy secos, los aperitivos llevaban muuuuuchas horas hechos, las bravas eran mas salsas que patatas. La camarera dudaba constantemente de para quien iba el pedido que llevaba, un desastre de organización. La terraza es pequeña por lo que de 1,5m entre las mesas, imposible. La musica a tope por lo que la gente grita para poder hablar y es bastante desagradable. En fin, no volveremos.

Los camareros novatos estaban muy perdidos, servicio lentísimo, arroz duro sin cocer bien. Los postres están muy buenos y la terraza bien ubicada, y aunque el dueño es muy atento y amable, sin duda la torpeza de sus trabajadores hace que se quiten las ganas de volver.