Casa Goyo en Manzanares el Real

Vamos que ni le daría una estrella, fui con mi pareja a tomar algo y comer porque era primera vez que veníamos a el pueblo y me llevo una decepción de el lugar, lastima porque es muy bonita la terraza. Nos sentamos en la terraza y pasada una hora no nos atendieron nunca, uno de los camareros hasta recogió la propina que le había dejado los clientes anteriores que nosotros y no nos preguntó si se nos ofrecía algo, nada que el siguió luego se fue a fumar su cigarro y con su móvil en toda la entrada del restaurante hablando con su compañera tan relajado y pasaba de nosotros, ninguno de los camareros se molestó en acercarse y preguntarnos nada o si cerraban al menos decírnoslo porque dudo que cerraran ya que estaban sacando platos a algunas mesas y los gritos del chico de la barra hablándole mal a sus compañeros que no iba a servir bebidas que las sirvieran ellos se escuchaban afuera. No volveré, gracias por nada.

Servicio regular. Como no te conocen, no te ponen aperitivo con las bebidas cuando a otros clientes locales si se lo han puesto. No les gusta el pago con tarjeta según comentó inicialmente el camarero que en 2 mesas recomendó el pago con efectivo haciendo bromas sobre ir por la vida sin efectivo y dependiendo de una tarjeta de crédito. No volveré y no lo recomiendo.Gracias por la respuesta al propietario. Cuiden a otros futuros clientes con el tema del aperitivo, sienta mal cuando se piden 2 consumiciones diferentes y ve uno que en otras mesas ponen aperitivo...

La terraza es preciosa. La atención muy mala. Precios elevados. Comida regular tirando a mal. Pedimos secreto ibérico y de ibérico nada. Carne dura, sin sabor. Un secreto ibérico con patatas de bolsa 15 euros!!! De verdad? Ahora bien, sentarse en la terraza en sombra en pleno verano y con vistas a la iglesia, ha sido muy agradable. No aprovechan la ubicación privilegiada que tienen desde luego.

Comimos aquí dos veces y todo fenomenal. La carrillada riquísima. La lubina, las albóndigas y las croquetas muy ricas también. Trato muy bueno.

El camarero, desconozco el motivo la verdad nos ha tratado mal, A parte del refresco y tinto de verano que pedimos en la terraza, le pedí un vaso de agua y no lo trajo, me levanté yo y fui a la barra a pedirlo y parece que le sentó mal. Malas caras por parte de este señor y nos hizo esperar para traernos la cuenta sin que tuviese trabajo en esos momentos, simplemente nos hizo esperar. Yo empatizo totalmente con el trabajador, y por supuesto con los camareros pero este en concreto no se porque te trata mal por qué si, sin más. En fin gracias a este camarero ya no volveré más a este lugar. Un sitio que parece agradable te lo hace desagradable el camarero que atiende por las tardes ya digo sin motivo aparente, simplemente por qué no le gusta tu cara o porque después de quince minutos sin que te traiga el vaso de agua que le has pedido a parte de tu consumición vas tú y lo pides en la barra. Si tratáis así a todos los clientes que se os sientan en la terraza os hacéis famosos en dos días.

Buenos platos y raciones generosas. Camareros muy atentos y amables. La terraza es bastante agradable y amplia, en pleno centro del pueblo. Ideal para aperitivo, comer o tapear. Volveremos! 100% recomendable.

Acudimos a este lugar por su belleza externa (la casa es preciosa) pero no disponen de mucha variedad de cerveza (Mahou 3€) y tampoco disponían de cerveza sin gluten porque se les había agotado 😢 Las opciones de aperitivo son patatas fritas o aceitunas. Camareros atentos y rápidos en servicio.

Trato amable del personal pero el producto es penoso, las migas frías, la carne de vaca insípida y mal cocinada, y el queso rico pero escaso para el precio. Es una pena ir a la sierra y encontrarte un sitio con un producto caro y malo. Nada recomendable, más que para tomarte una caña y poco más

Nunca decepciona, calidad a buen precio.Increíbles ensaladas de tomate, el pisto con huevo, las migas al pastorTaquitos de solomillo, los boquerones.Terraza y salón.