Mesón Taberna Andaluza Casa Manolo en Móstoles

Tomamos café y un mollete con jamón para desayunar. El mollete, bien, pero el café parecía requemado, como si no hubieran cambiado la carga y hubieran hecho dos o tres con la misma. También puede ser que el café sea muy malo, en ese caso que cambien de marca.

Templo de la gastronomía de barrio en Móstoles, atención excelente por los profesionales que allí trabajan, como extra hemos conocido a Carlos, que es amigo de dos camareros y a su vez conocía a Manuel Díaz Heras que es el primo de Fernando Sánchez Diesel... mención especial al gazpacho que viene con guarnición sin sobrecoste adicional...PD: hemos venido desde Barbate a probar el pescadito frito y ha merecido la pena a pesar del coste de la gasolina.

La primera vez que me voy sin tocar un plato.De primero me pido gazpacho y me traen una sopa aguada insípida.De segundo pido pollo a la cerveza y me traen un revuelto de algo que dicen que es pollo.Qué parte del pollo? Ese es el misterio, yo apuesto por cuello y casquería variada.Jamás vuelvo y no lo recomiendo.Como muchas veces fuera de casa y nunca había encontrado algo de tan baja calidad.Un menú de polígono es un 5 tenedores al lado de esta tomadura de pelo.

Excelente servicio y atención de los camareros. Todo muy pero que muy rico. Calidad y precio asequibles. Volveré.

Si quieres comer buen pescado frito de calidad y con raciones generosas tienes dos posibilidades...o te vas a Cádiz y disfrutas de un cucurucho de pescaito inigualable o vienes aquí y disfrutas ahorrándote 1200 kilómetros. Lo de las rabas un escándalo de buenas.Servicio muy atento y profesional.

Muy bueno el menú de fin de semana. Variado y de muy buena calidad.No le doy las 5 estrellas porque fueron 20€, pero lo recomiendo.

Han subido el menú de 9.20€ a 10€. Hay días o que se dan prisa y otros que haya mucha lentitud. A veces te ponen corriendo el primero y el segundo. Hay un camarero que lleva todo el brazo tatuado que siempre está dando vueltas por las mesas vigilando,que parece el comedor de un colegio. Y hay otro camarero que es muy muy lento pero más majo que el que parece que vigila las mesas. Los trozos del pollo y del conejo son muy gordos. Las patatas fritas duras y a veces ni se pueden comer. Hay cosas que que ejan mucho que desear en cuanto a platos. Luego llamas para que te digan que hay de menú y te dicen pues cocido y no te dicen más. Tienen que entender que hay gente que no pueden desplazarse para verlo o pueden tener intolerancia a algún alimento. Deberían moverse por internet porque los modales por teléfono muy malos y malas contestaciones.

Buen sitio para comer, excelente trato, limpio y todo riquísimo.

La fritura de pescado no nos gustó nada. La oreja a la plancha como una piedra. Las patatas bravas bien. El camarero muy amable.