El pasado 12 de octubre llegamos al restaurante sobre las 15:00, hora a la que teníamos reserva y….Servilletas y platos mojados, el día anterior había llovido. Pedimos la bebida, a los 45 minutos de pedir la bebida solicitamos algo de aperitivo para acompañar pues los platos no salían. (Nos pusieron un platito de lomo y pidieron disculpas). Llegan los primeros, y los “pimientos cristal con su ventresca” llegan sin ventresca, retiran los platos de pimiento para ponerles unas latas de atún que por o desmenuzado que llegó no parecían ni de ventresca. Cuando marchan los platos de los pimientos, sobre las 16:15 falta el de un comensal, dado que había platos calientes se terminan los primeros y un comensal a verlas venir. Los espárragos verdes y los clásicos blancos eran tan cual, un triste plato sin acompañamiento. 16:30 y empiezan a marchar los segundos, el arroz con carrilleras era un arroz pastoso con exceso de sal (no lo imagináis, como tres veces sal) y sabor a apio, era incomible y para dos personas, es cierto que un comensal cambio de plato pero otro de ellos ya tenía mal cuerpo y prefirió no comer más. Otro plato, fue el tartar de atún, incomible, un aguacate limpio y vacíado relleno de trozos de atún en salsa de soja ¡Solo sabía a soja! No se podía degustar nada el atún, supersalado. ofrecieron cambiarlo, pero las alternativas eran pocas, solo el solomillo estaba bueno. Total, dos comensales que se quedan sin segundo plato. Además, pedimos más pan y no llego nunca. Postres, ya solo ofrecen trata de manzana, flan y crema catalana. Nos ofrecen chupitos que tampoco no trajeron, y en la cuenta nos intentan cobrar un vino joven a precio de reserva, nos descontaron los importes de los platos no consumidos.A lo largo de la comida nos pidieron varias veces disculpas, pero el resumen, que nos trasladaron, fue que el camarero era de un extra que no conoce los platos ni las bebidas, y que estaban sin cocinero por COVID para el que no consiguieron reemplazo. Esto es lo que nos tendrían que haber avisado por que los platos fueron lamentables.