Principe de Gales en Murcia

El dueño nos trató fatal, gritando e insultando por cambiarnos de mesa, sin dar opción a explicarnos. A una amiga la levantó de la silla porque "no estaba consumiendo" (acababa de llegar, no le había dado tiempo). Malas formas en todo momento hacia clientes y camareros (uno de ellos, el único educado del lugar).Precios desorbitados, te obligan a estar continuamente consumiendo y si no te largan de malas maneras.Primera y última vez que nos sentamos ahí.

El gerente/propietario un maleducado. Los camareros avergonzados de las formas de este señor. Si solicitas hoja de reclamaciones, responde con improperios.

Trato horrible, el gerente/ camarero con dudoso estado sobrio, gritandonos y hablándonos de muy malas maneras por cambiar de mesa para hacer el favor a unas chicas de la mesa de al lado que ni conociamos. Yo que llegué tarde al ver esa situación desagradable le dije que no iba a consumir y me obligó a levantarme, pero porque casi me quita la silla estando ya sentada y me quito la silla. Un amigo le pidió la hoja de reclamaciones y él señor le dijo te la daré cuando a mí me de la gana y la hoja de reclamaciones nunca la trajo. Por supuesto hemos llamado a la policía. Recomiendo que no vayáis si no queréis que os traten sin respeto y paséis un mal rato.

El dueño un maleducado y un trato pésimo, salvo un camarero que está alli el pobre porque no tendrá otro sitio donde trabajar.

Bajo mi punto de vista, el camarero Álvaro José de un 10 una atención explendida y las patatas bravas y su tinto exquisito

Trato absolutamente lamentable por parte del gerente (el grandote).Hace ya unos años, y después de estar un rato sentados nos dijo que nos levantaramos de una mesa para ponernos en otra (pequeña y donde no cambiamos). Evidentemente pagamos y nos fuimos del local.Mas adelante, cuando España estaba jugando el Mundial, hice una reserva de una mesa para 6 personas para ver un partido, dejando una fianza de 20 euros, tras ver el partido y cenar y beber las 6 personas, me devolvió la fianza a regañadientes y perdonándome la vida.Ayer fue mi hermana al local con sus amigos, algunos menores de edad. Y de nuevo poquísima educación. Los echó del bar aludiendo que eran menores (esto lo puedo entender) al grito de "aire", mientras gesticulaba con las manos.No vuelvo en mi vida.

Para empezar un Aquarius vale 2'50, básicamente un robo. Y para estar sentado en una terraza totalmente vacía tienes que consumir y eso que mis acompañantes habían pedido consumiciones, me siento estafado y tonto, un insulto a la inteligencia del consumidor.

Sinceramente parecía una casa del terror de verdad horrible entramos al baño y uno no iba la luz no sabía si era de tia o de tio y encima to grafiteado

Hoy me comí una bicicleta y picaba fíjate tu como tiene que estar esa ensaladilla... Una cerveza agua y dos bicicletas 7,50 estafa total