Restautante Filka en Sepúlveda

Muy buen servicio, la tapa muy rica y buen ambiente.

No suelo poner malas notas ,pero es importante darle un toque de atención a los propietarios,un descontrol en el servicio...si te lo tomas bien,aún llegas a reírte de la situación y de las caras de los clientes....pero la función de un restaurante es dar de comer bien y con buena atención ....no convertirlo en el club de la comedia.Lo siento por el personal que se esfuerza

El típico local que lo tiene TODO, local muy sucio, servicio pésimo y la comida nefasta.Queríamos cenar algo, nos enseñan la carta, pedimos bocadillos y dicen que no tienen pan.Pedimos dos sándwiches y nos traen dos rebanadas de pan de molde que tenían mal sabor con una loncha de queso y una de jamón York que se perdían entre los dos panes.Lo único que nos supo bueno fue la bebida que era embotellada. En la próxima visita a Sepúlveda esquivaremos éste local.

Tiene muy buena ubicación.Los camareros son muy amables y atentos.La comida esta muy rica y ponen variedad de tapas.Sin lugar a dudas volveré muy pronto.

Para mi y mi familia, un lugar estupendo.Me he comido un chuleton 😋, que hacia tiempo que no habia comido. Mi mujer y mi niña, un cuarto de cordero espetacular. Acompañado de unas patatas frias y ensalada muy bien elaborada acompañado de un buen vino y casera para el que quisiera. Postre caseros y muy ricos. Todo eso por un precio super economico que yo no me lo esperaba, asi que cuando me toca volver por alli, no dudaré en volver a comer. Totalmente recomendable.

Después de entrar en ese local con el suelo mugriento (de pegarse el calzado), lavarnos las manos en un aseo en condiciones pésimas, y un olor a aceite sucio, sentarnos a la mesa, ver las caras de los comensales y leer las reseñas, decidimos salir pitando. Me gustaría saber si de vez en cuando pasa algún tipo de inspección sanitaria, eso era una auténtica marranada. No quiero ni pensar como tendrán la cocina.

Cometimos el error de no mirar las reseñas por coger rápido una mesa al sol en la terraza. No se os ocurra comer allí. Un verdadero horror, en mi vida había comido unas patatas fritas con ese olor a aceite rancio, bueno en realidad no las comimos. El camarero un pasota de escándalo, nada le importaba. Cuando entré para pasar a los servicios me di cuenta de que no debía seguir allí ni un minuto más. 36 euros tirados a la basura pero al menos pudimos salir sanos.

Efectivamente es el último lugar en llenarse de la plaza. Pero tampoco es tan malo aunque nunca sería mi primera opción.Los camareros son simpáticos, tardaron poco en servirnos. Las judías se notaba que no eran hechas del día pero estaban buenas. Las patatas sabían a pescao y la carne no era de muy buena calidad. Demasiado caro 20 euros.

Si hubiera 0 estrellas, asi los calificaria. Preguntamos antes de sentarnos ppr si estaban en servicio, pero luego no tenian nada ni para tomar. Tuvimos que pedir que limpien la mesa. El mozo estaba alterado, lo primero que nos dijo fue "la cocina ya esta cerrada" de muy mal modo. Si queres que ordene decime que tienen para ofrecer, pero no, era señalar algo y contestar que no, otra cosa y contestar que no. Evidentemente sobra el trabajo aquí para hacerlo tan mal. No vayan.