Los Caracoles en Sevilla

He ido varias veces, dándole varias oportunidades, porque hace unos años estaba bien, pero efectivamente han ido empeorando en todo... El servicio deja mucho que desear, desde el momento de hacer la reserva, hasta el final.Tardamos bastante en que alguien nos tomara nota para la bebida, y eso que nos habían sentado ellos por la reserva.Tardaron hasta para cobrarse, eso sí, una gran atención para insistir en que pidamos la comida.Los caracoles han bajado muchísimo la calidad, el propio caracol no tenía nada de sabor.En general, en mi opinión y experiencia, es caro para la calidad-cantidad que viene.Por último, destacar que la bebida siempre te ponen la más grande, cerveza y tinto en nuestro caso, sin preguntar previamente, cosa que no me parece del todo serio.Un poco decepcionada con todo. Espero que vayan puliendo las cosillas que han ido dejando.

El encargado nos ha dicho que tenía todo el bar reservado y estaba vacío tanto el interior de los dos bares como la terraza y antes de salir a FelipeII hemos llamado para reservar y tenía mesa para 20 minutos más tarde. Íbamos con dos niños, será que le molestan los niñosEncargado bastante antipático en sus formas. No creo que volvamos

Fui hace unos meses y de los bares que mas me ha sorprendido, comida explendida, las pizzas del local de al lado (que son el mismo) buenisimas, y el trato de los camareros fue muy agradable, de los mas profesionales que he tratado, lo recomiendo

El servicio muy atento, rápido y eficaz, el precio quizás un poco elevado, la cantidad de comida en según qué tapas era escasa, la comida estaba muy buena, el atún rojo muy rico pero una parte la dejaron cruda.Algo que no me gustó fue que el camarero de la terraza estaba fumando, no me parece muy higiénico y además molestaba el humo, si no hay nadie sentado vale, pero habiendo gente en la terraza, no me parece correcto.

Este bar ha sido de nuestro barrio toda la vida. No sabemos si han cambiado de dueño o es que directamente hoy les hemos pillado en su día más antipático. Eran las 20h y tenían la terraza vacía con apenas una mesa ocupada. Les hemos dicho si podíamos tomarnos una coca cola rápida pero no para cenar (temiendo en cuenta que es miércoles esto no debería de ser gran problema a esas horas). El camarero (cuya simpatía ha brillado por su ausencia) nos ha contestado que para consumir una coca cola sola es más tipo cafetería y eso no lo era. Nos hemos quedado a cuadros y se nos han quitado las ganas de volver a un bar que siempre había sido un básico y bar mítico de nuestro barrio.P.d: al final nos tomamos el refresco en un bar cercano y al pasar a las 21:30 por este seguían teniendo la terraza vacía. Creo que no hace falta añadir más... ;)

Un lugar en el que comer algo diferente. Además de la carta existen tapas espectaculares fuera de ella. La atención es fenomenal y el servicio impecable. Repetiré

Magnífico descubrimiento! Buena calidad de producto, buena cocina, y trato magnífico. Sin duda un sitio muy recomendable.

Sitio que no esperas tenga buenas tapas! Tiene pinta de restaurante italiano, pero no lo es, sirven tapas muy ricas y variadas. Hay que reservar porque están siempre llenos. El hombre sentado en el banco a la entrada, que mira de arriba abajo a todas las mujeres, es un poco cortante. (No sé si es el encargado o qué, pero ese tipo de actitud sobra) Síguenos en IG @lifelovedreamz

Ha. Reformado el interior . Siempre hay sitio y amabilidad . Todo fresco y tradicional . Navajas , boquerones , pastela , riquísima ensaladilla . El dueño siempre pendiente de todo , hasta el último detalle . Siempre siempre pendiente . Se nos ha caído una copa y en un segundo han llegado a preguntar si nos habíamos manchado . Nos han hecho sentir protagonistas . Y los caracoles , buenos buenos . Los compro siempre para llevar . Gracias por estar siempre a nuestro servicio .