El Balcon De La Brisa en Alboraya

Los camareros super atentos todo el rato, la comida bastante bien. Nada más que decir sino aconsejar este local un 100%

Excelente cena. Mejillones muy buenos. Chopitos excelentes. Muy buena atención. Precios muy buenos para ser a pie de playa. Mis felicitaciones al restaurante

excelente comida lugar y sobre todo excelentísimo servicio por todos los camareros y dueño. en especial el camarero de la foto que fue mi camarero y nos atendía de maravilla

me encanta el servicio la comida y sobre todos los camareros me enamorarnos de la delicadeza con quién nos atendieron

Calidad precio inadecuada. La ración de calamares tenía solo 6 trocitos. Los entrantes del menú no se podían elegir y eran para compartir. Además de que ponía "croquetas" y te sacaban una por persona. La fidegua, si es que se le puede llamar así, parecían espaguetis cortados. Se notaba que estaba recalentada de micro y muy seca, además de que la gamba (la segunda de la foto es del otro plato) que toco por plato estaba pasada.Además te exigían ser al menos dos para pedir el menu pero te sacaban un plato en vez de la paellera.Demasiado caro para no incluir ni siquiera ni la bebida ni pan.

Había una mesa libre y nos sentamos en la terraza 4 personas a las 22:50h , el camarero Roberto , 15 min después se acerca y nos dice que la cocina va a cerrar , sacando platos de otras mesas y el restaurante casi lleno, entonces le pregunto que si podemos pedir si o no ? Pues estaba hablando mucho y siendo poco directo.Tan groseramente y maleducado me indica que yo me he sentado sin avisarle , y que había gente esperando. ….. cuando llegamos no había nadie esperando y el responsable de recepción que se supone que es lo k venden , no estaba en su sitio.Al final nos levantamos y nos fuimos sin cenar.Entiendo que el personal está cansado , la hostelería es algo duro , pero de con esta forma de tratar al cliente seguirán teniendo la puntuación tan mediocre que los representa en Google. Un poco de tacto con la gente k decide consumir en su local , k el año es muy duro y las vacaciones muy cortas.

Magnífico lugar para cenar de tapas. El revuelto de espárragos y gambas extraordinario. Los calamares tiernos y el pincho moruno entraba solo por su magnífico olor. Los camareros diligentes, muy atentos, preguntando si todo bien, si estábamos atendidos. Tienen una terraza amplia con mesas para cuatro o más comensales y el balcón, con vistas al mar, para mesas de dos. La relación calidad precio muy buena. Un lugar para regresar..

Nos sentamos esta mañana a desayunar en las mesas que tienen afuera, y después de esperar un buen rato, viendo que nos ignoran y nadie se acerca, vemos que se asoma a la entrada del bar no se si el dueño o un camarero, y después de mirarle un rato, por fin se digna a decirnos a voces: AHI NO VAMOS A ATENDEROS. Asique nos levantamos para irnos por que menuda atención. Y ademas le anulamos la reserva que habíamos hecho con Natalie el día anterior para varias parrilladas para ir con la familia, y nos responde: PERFECTO, PUES MUY BIEN. Todo a voces, sin acercarse, con una chulería, se ve que les sobran los clientes. Nos había gustado por que Natalie nos ha atendido de maravilla otros días, pero esta persona con ese trato ha hecho que no queramos volver.

Terraza en un sitio inmejorable, al lado de la playa, y cierto es, con la brisita corriendo. Pedimos unos chopitos, buenos, unos mejillones que estaban excelentes y unos pinchos de tortilla de patata, bien también, pero para mi gusto, la patata estaba muy cuajada. El servicio pichí, pichí...