La Parrilla en Gandia

Muy buen sitio para comer cerquita de la playa, tiene terraza amplia y su camarera Carla es muy atenta aunque recibe poca ayuda de sus compañeros.Teniamos reservada una paella de marisco oa cual tardo poquito en salir, de entrante para picar algo mientras salia la paella pedimos media racion de lomo iberico y unos panecillos tostados de aceite con alioli que te los suelen ofrecer los camareros (ambas cosas estan muy ricas).La paella de marisco muy buena y bien de cantidad, da para dos platos para cada uno.Le doy 4 estrellas porque los camareros deberian ayudarse mas entre ellos.

Comimos gazpacho de menú (era claramente de bote). Tardaron en traternos el segundo media hora después de haber terminado con el primero y estaba frío. La paella estaba malísima, el arroz pasado y salado. Cuando le pedimos que lo calentase, se la llevó y la trajo igual. El marisco no se podía ni comer. NADA recomendable.

Fuimos a comer un arroz con bogavante para 3. Escaso en ingredientes y sabor normalito. Desde que nos sentamos en la mesa vimos como el jefe trataba fatal a todos sus empleados, incluso hizo llorar a una de las camareras. Demasiado bien nos trataron los camareros para lo quemados que debían estar. Pueden ser nuevos pero no sé les puede tratar así. No volveremos por no ver el trato de este señor, todo un espectáculo.

La atención recibida por parte del camarero que nos atendió, muy bien, muy educado y atento. Pero habia un señor que debe ser el dueño o responsable que tiene un trato cuando menos dudoso con el servicio. Estábamos alucinados. Muchos puntos de mejora en este restaurante. Lo primero el respeto. Hablando de la comida, pues nada especial. Cantidad correcta calidad normal.

La atención de los camareros muy buena. El producto un desastre. Te venden como frescos ingredientes congelados, fritos y refritos, los mejillones al vapor: más de la mitad cerrados, a saber cuánto llevaban ahí. Todo esto por precios altísimos. También nos cobraron por "pan tostado" con alioli que no pedimos. Además el que parecía el encargado tratando fatal a sus empleados delante de los clientes. Horrible.

Buena arrocería. No es barata pero sales satisfecho de la relación precio/calidad. Buena atención del personal. Variedad en la carta. Ubicada en el paseo marítimo. Hay que reservar. Repetiremos.

La atención es mala. En relación a la comida estaba bastante insípida, ni sal y también estaba fría. Las bebidas las sirvieron sin vasos.Reservamos el sitio dentro y nos pusieron en una terraza cutre, el horario de la reserva tampoco lo cumplieron haciéndonos esperar 30 minutos de más hasta que nos sentaron y la mesa estaba sin limpiar.Las bebidas las sirvieron sin vasos.

Relación calidad precio buena. Los camareros son encantadores, pero el responsable deja mucho que desear. Les da a sus empleados un trato humillante que hace sentir al comensal bastante incómodo. De hecho nos fuimos sin tomar ni postre ni café por no soportar más el mal ambiente. Lo peor el cobro de la ración de un pan con alioli a 3€ sin pedirlo y sin alioli...

Empezar por lo bien atendidos que fuimos, los camareros estaban pendientes en todo momento y los platos salían bien de tiempo.De picar las croquetas estan muy buenas.Te vuelven a meter al fuego la carne si la quieres mas hecha. Aunque en mi opinión la carne estaba bastante seca a pesar de estar al punto.Finalmente invitaron a un chupito de la casa y un surtido de dulces.Precios un poco caros, pero lo nornao en un asador/arrocería.Local grande, con terraza cubierta