Cerveceria Rio Mundo en Torrent

Es un quiero y no puedo, ni punto de comparación al antiguo.No les quedaba de nada, y eran las 22:30, ni tortilla de patata, ofrecieron una sola hamburguesa, muy mal surtido( más de 3/4 partes de la carta no esta disponible).Y antaño cuando tenias decenas de cervezas y te explicaban su procedencia, ni una paulaner hay, con las cervezas más de lo mismo.Y encima caro.No recomiendo.Un quiero y no puedo o no se.

Un lugar con mucho encanto donde estarás súper a gusto. Tienen una variedad infinita de cervezas y las tapas y bocadillos están muy ricos. ¡Es uno de mis sitios favoritos para ir con mis amigos! Recomendable 100%

Una velada muy agradable, buenas cervezas para elegir, también tienen vinos, para los que no tomamos cervezas, y lo puedes acompañar con una picada más Sevilla o quedarte y degustar una cena con muchas posibilidades o alguna comida. En cualquier caso quedarás bien. El trato del personal ha sido muy bueno, aunque son jóvenes tienen una atención estupenda. Gracias a todo el equipo.

Es una lástima, pero si siguen así volverán a cerrar. Desde esta reapertura, hemos ido 2 veces y van a peor. Por favor que pongan a alguien con experiencia del antiguo Riomundo que enseñe al cocinero y a los camareros. Yo creo que en un mes aprenderían porque se les ve educados y voluntariosos, pero no tienen ni idea.

Sin rumbo claroHerederos no solo de un local emblemático también de una modelo basado en el culto a la cerveza, donde se podía disfrutar de infinidad de variedades siempre bien aconsejado y acompañadas de la tapa justa u adequada.Me he encontrado con el mismo local, decoración (paredes forradas de cervezas que invitan a probarlas), pero con una propuesta desdibujada a caballo entre una cervecería y un bar-restaurante, que no sabe bien hacia donde definirse.No es una cervecería aunque nos ofrezca una aceptable variedad de las mismas ( ha perdido la esencia de poder encontrar esa cerveza diferente).No acierta a ser bar-restaurante perdido en una carta que debería replantearse, a una cervecería no se va a comer arroces y una calidad de producto muy básica.Como ejemplo comento mi visita. Cerveza de barril medias pintas (vaso caña a un precio a revisar) tapa de queso ( lonchas de 2 mm) 100gr., (Flor de esgeva cobrado a 90€/kg). Jamón ibérico 100gr. cortado grueso y lonchas del despiece (200€/kg) Croquetas de cocido y bacalao, precocinadas i congeladas, bravas (patatas muy fritas con allioli). Puedo destacar dos cosas, montadito de sardina (preparación casera) y Tatin de manzana de postre.Destacar la atención y el servicio.En las fotos se aprecia lo comentado.Definiendo donde posicionar la propuesta gastronómica puede llegar a ser de nuevo un local referente.

El sitio, acogedor. L@s camarer@s, amables y serviciales. La comida, exquisita y el precio, correcto. Muy aconsejable.

Increíble la atención simpatía y Amabilidad de el personal, la atención respecto a nuestras mascotas instaladas en terraza y la variedad de cervezas como antaño hemos tenido en este local, la limpieza y atención en los aseos, más los chupitos mallorquines de la casa y las tapas tan acertadas para tales cervezas hacen de este lugar un sitio familiar y mágico en este pueblo que carece de lugares tan especiales, gracias por la velada tan auténtica. Sin duda para regresar una y mil veces. Gracias.

Gran variedad de cervezas, vino buenísimo y las tapas espectaculares

Entiendo que ya no sean los mismos dueños, que haya que dar una oportunidad a la gente nueva, etc... Pero voy a tener el atrevimiento de dar un consejo a los nuevos propietarios. Yo también he trabajado años en la hostelería y entiendo la relación entre la calidad, la cantidad y el coste, pero les recomiendo que no caigan en la trampa de pensar que solo el antiguo renombre de un local, va a garantizar la asistencia de la gente. Hay que tener una calidad fuera de serie, cuando sirves un principal con menos cantidad que si fuera una tapa... Y puede que no sea el caso. Hoy en día, muchos negocios de corte sofisticado, piensan que la calidad sustituye a la cantidad. Hay paladares para todo, y esto es solo una opinión, pero se nota la intención de llegar a los bolsillos de cierto tipo de cliente, que son más propensos al renombre que a la calidad. Seguro que mejorarán con el tiempo.