Mostaza y Media en Gijón

En pocas palabras: el paraíso de toda persona vegana y seguro que de muchas no veganas, también. De tres días que estuvimos en Gijón fuimos tres veces para poder probar gran parte de la carta.Comida casera, típica asturiana, con gran sabor, buen precio y mucho mimo.Acordaos que el cachopo se hace bajo reserva, es un must en tu visita. Aunque sea difícil escoger un plato favorito, recomiendo totalmente además del cachopo, los Tortos y el Raxo.Volveremos sin duda, porque además de la deliciosa comida el trato fue exquisito.Comida vegetariana: Deliciosa,económica y típica asturiana

Toda una experiencia para los amantes de la NO carne ni nada de origen animal! Muy cerquita de la playa está este restaurante muy bonito y cuco. La carta del restaurante está escrita en pizarras,no tienen carta física y si deseas comer cachopo vegano hay que reservar al menos unas horas de antelación (preguntar o llamar para saber más) (yo me quedé sin porque no sabía este dato) pero los platos que elegimos deliciosos. Patatas allioli, No pollo al ajillo y burguer de la casa y de postre frixuelos con crema de lotus. Los precios son más que asequibles,una suerte para los de Gijón tener un restaurante tan competente y barato! Las trabajadoras del local muy simpáticas y profesionales. Recomendadísimo!

Comida riquísima y cantidades adecuadas. Con 2 platos o entrantes y un postre ya estas bien. Precios muy asequibles.Lo peor que no haya carta en papel ni QR para escanear. El local es antiguo y no está muy decorado.

De los mejores veganos que he probado, probamos unos cangresandwiches, una beyond burguer, unos tortos de picadillo y una ensaladilla que no dio tiempo a hacer foto porque la devoramos. Riquísimo todo y ambientazo, volveré sin duda.

Comida riquísima y precios muy buenos.Probamos el pan de ajo-pizza, los mac and cheese y la francesinha y todo estaba delicioso. El servicio fue bueno y rápido.Totalmente recomendable, sin duda volveremos cuando volvamos a Gijón.

Era la primera vez que iba a un bar vegano y la experiencia fue espectacular. El lugar súper acogedor y bonito, limpio y ordenado. Vanesa fue quien nos atendió y muy amable en todo momento, me recomendó y me explicó todo lo que le fui preguntando. Me decidí por un picadillo con tofu y tortos con "chorizo y morcilla". Lo mejor que he comido en mi vida. No me hubiera marchado de allí para seguir probando cosas.Cocina brutal para probar mil cosas

Buen restaurante vegano, sencillo, pequeño y muy recomendable. Aunque tardaron en servirnos la comida estaba espectacular y muy recomendable. Sopa de miso y francesinha espectacular. Tarta de Gijón y la de chocolate y avellanas para relamerse. El precio es barato y fuimos el sábado Santo y no tuvimos problemas aunque reservaremos en el último momento.

Después de pasar un fin de semana en Gijón enfocando el tema culinario a locales exclusivamente (o en su gran mayoría) veganos, nos encontramos con dos conclusiones: una, que hay mucha más oferta de lo que esperábamos (y que vaya en aumento) y dos, que el restaurante Mostaza y Media es de los mejores locales en los que hemos comido hasta el día de hoy. Lógicamente no podemos hablar por toda la carta (que lo haremos, porque vamos a repetir sin duda) pero lo que pudimos comer fue simplemente exquisito. Tan solo pedimos unos tortos de picadillo y de morcilla junto con una ensalada de atun y bacon y un perrito "Sloopy Joes", todo para compartir, y simplemente a cada cual mejor. No tengo ni idea de cómo lo hacen en la cocina (nos comentaron que era mayoritariamente seitán "tratado de forma especial") pero ojalá que esas manos y esa cabeza no pierdan ese toque nunca. Decir que es recomendable es quedarse corto. El local es relativamente pequeño (si no recuerdo mal son 6 mesas de 4 comensales cada una) y vino gente sin reserva y lo tenían todo cogido, así que es extremadamente recomendable reservar si es que visitarles es uno de tus requisitos (que debería). Ya lo teníamos apuntado desde hacía tiempo y no nos defraudó en absoluto. Ah! y el que escribe NO es vegano, por si hay alguien que pueda pensar que es para paladares "especiales". No dejeis que os engañen ciertos prejuicios porque, sobre todo en este caso, no sabeis lo que os vais a perder...

Nos encantó, la comida estaba buenísima. Lo que más nos gustó los tortos de picadillo. Increíble la relación calidad precio, el servicio muy agradable.El único punto negativo que al final tardaron mucho en atendernos (veo normal porque estaba hasta arriba el bar) para los postres, nos hubiese gustado pedir unos frixuelos pero nos dijeron que iban a tardar mucho en salir, al final pedimos una tarta de choco avellana que estaba de muerte.Repetiré seguro, quizá yendo un poco mas temprano