Santo Taquería en Bilbao

El local es agradable y la comida muy buena. Ideal especialmente para compartir entre varios.

El local es agradable, pero la comida deja que desear. Además había falta de camareros, ya que comparten con el dinámico, lo tenían un poco desatendido. El queso Chedar un poco malo y en exceso en los platos.

Es un restaurante que merece la pena ir. Los nachos son los de los mejores de Bilbao, están entre mi Top cinco de todo Bilbao. La ensalada también está muy bien y la hamburguesa es digna de probar. Los burritos y las enchiladas también merecen mucho la pena.

El restaurante se encuentra situado en local amplio, bien decorado, sillas cómodas, varios baños; El personal amable, realiza su labor de forma adecuada. La comida viene con una buena presentación, cómo podréis ver en las fotos, pero desde mi gusto, los productos tienen un exceso de salsas y grasas que quitan el sabor de la materia prima. Los nachos estaban ligeramente revenidos, aunque su sabor no era malo. El pollo rebozado no es pechuga, es un sucedáneo que en algunos es rosa y en otros blanco, con un sabor que destaca demasiado y contrasta con el típico sabor insípido del pollo.

Me gusto, buena ambientación y buena comida. Lo mejor, los nachos, muy buenos.Lo peor, la coordinación de las empleadas, pedimos a una camarera bebidas y nos las trajo tuvimos que volver a pedirlas. Pero por el resto muy bien.

La comida es buena y he estado en el local en anteriores ocasiones, pero he tenido que realizar un pedido a través de Glovo (con tarifa de entrega) pese a vivir a menos de 2 minutos y pretender pasar a recogerlo por el local porque ni la web funcionaba correctamente (no dejaba introducir la tarjeta y si no no te dejaba continuar) ni atendían el teléfono. Queda claro que o vas al local, o olvídate.

Buena relación calidad-precios. Elegí de primero una quesadilla y de segundo el burrito, estaba todo muy rico. El menú cuesta 11,95, nada mal para la cantidad que ponen. Buena atención del personal, repetiría sin duda.

Habíamos reservado un sábado para cenar sobre las 22:30 y acabamos saliendo del local sobre la 1. El servicio fue súper lento tardaron en sacarnos la comida muchísimo incluso les tuvimos que repetir varias veces ya que se habían olvidado. Es verdad que las camareras no paraban pero reforzar el personal en las horas puntas sería una buena solución. En cuanto a la comida las raciones son pequeñas para el precio que tienen pero no están mal, lo mejor fueron los tacos de cochinita pibil.

Hace tiempo tenía bastante más calidad que ahora.Los burritos y las fajitas, normalito.Fuimos un viernes por la noche y no tuvimos ningún problema para encontrar sitio porque había poquita gente