Toma Y Daka en Bilbao

Esta muy céntrico el personal rápido y agradable. La comida muy buena. Y de precio muy bien. De poner alguna pega sería que la cocina cierra a las 22.00

Restaurante ubicado en la Plaza Nueva de Bilbao, una zona que cuenta con un gran número de bares y restaurantes.El restaurante cuenta con una gran variedad de platos.La ensalada de burrata y los boquerones en vinagre gozaban de una gran calidad, aunque la cantidad era un poco escasa en relación con su precio.La lubina estaba en su punto, muy recomendada.La tarta de queso fue el postre elegido, destacaba por su gran sabor a queso y no era tan dulce como otras que te puedes encontrar, por lo que la recomiendo para los amantes del queso.

Super majas las camareras. Pintxos muy ricos y diferentes. Elaborados con cariño. Comimos también una ración de albóndigas muy buenas. Recomendable 100%, si pasas por Bilbao.

El servicio perfecto. La camarera nos busco desde detrás de la barra para atendernos rápidamente. Quizá el pan de los pinchos se queda algo reseco y deberían de calzarlos en pan recién cortado. La cerveza 18/70 riquisimaAparcamiento: Esta en la zona céntrica. Mejor ir andando

El pintxo qué mas me gusto de los que probé por Bilbao.La próxima vez probare mas pintxos e incluso txuleta que tiene una pinta impresionante.Después de varios locales solo pude probar el pintxo de bacalao pil pil que estaba espectacular. La tortilla de patata también muy buena.La camarera que nos atendió un encnto.

Reservamos mesa para dos personas con antelación.Cuál es nuestra sorpresa que al acomodarnos nos colocan en una mesa alta muy pequeña, junto a la barra y a la puerta de entrada al local.Al decirle al camarero que teníamos frío y que por favor nos colocase en otro lugar sin corriente (era un día muy frío con alerta por nieve) nos indica que no es posible y que nos podemos poner la chaqueta en las piernas. Curiosamente además de ver mesas para dos personas vacías, pudimos observar cómo acomodaban a otras reservas en sitios distintos a los previamente asignados cuando con nosotros no mostraron esa flexibilidad a pesar de haber mesas de dos personas y más amplias libres al otro lado de la barra y alejadas de la corriente (aunque estuvieran reservadas está en el criterio del responsable asignar esas mesas tras la solicitud de un cliente que muestra su descontento como se lo hicimos saber por la situación junto a la puerta).El camarero nos trae la carta y además nos canta una serie de productos fuera de carta de la que no indica los precios ni se encuentran en un anexo como es obligatorio.También nos ofrece agua y pan y accedemos, recibiendo una botella de agua no comercial (del grifo o filtrada) con el logotipo del local por la que, para nuestra sorpresa, al llegar la cuenta nos cobran 3€ que nos parece exagerado. 1,3€ por cada unidad de pan no es barato pero en este caso sí figura en carta.Los productos son de buena calidad, sabrosos, las cantidades correctas y la presentación es vistosa y apetitosa.El local está bien situado en pleno centro turístico de la Villa, correctamente ambientado y decorado y es agradable pero el lugar en el que nos colocaron no es el adecuado para un servicio de comida con reserva previa y una cuenta cercana a los 100€ para dos comensales. Podría entenderlo para picar algo de manera improvisada pero no para una reserva previa y menos habiendo solicitado el cambio.Una mayor flexibilidad ante la solicitud de un cliente habría derivado en un cliente satisfecho, una buena publicidad y que hubiésemos repetido a buen seguro. Siendo como fue... todo lo contrario porque no pudimos llegar a estar agusto.

Primera vez y no será la última. Carabineros a la brasa de 10 como todo lo demás que cenamos. La torrija lo mejor de los postres, increíble.

Espectacular + acierto total. Visitando la ciudad llegamos a cierta plaza donde se ubica dicho local. Precioso y con una barra central que llama la atención. Hizo un día espectacular así que nos pusieron en su terraza. Excelente calidad en sus platos, mucho sabor. Probamos ensalada de burrata, arroz con carabineros (súper recomendable) y la guinda del pastel, una lubina a la brasa con la que podías tocar el cielo. Increíble.Buena relación calidad precio. Muy recomendable.

Un restaurante muy agradable en una esquina de la plaza nueva. Buenos pinchos y variedad de cervezas. Buen trato y servicio.