Bar "El Tunel" en Laredo

La atención, estupenda.No puedo opinar d la comida, ya que me tomé un vino y nos pusieron una tapita.Buena variedad de vinos.El baño muy limpio.No apto para silla de ruedas.

Trato maravilloso.. Amabilidad, cercanía.... Un servicio de 10.La calidad espectacular. Todo calidad de primera y una relación calidad/ precios excelente. Lo recomendamos al 100% y seguro que repetiremos. Me lo ha recomendado un amigo y ha sido todo un descubrimiento.

Buen restaurante para comer a la carta. La tarta de queso, anchoas y los pescados a la plancha son impresionantes. El cachopo también muy rico.Servicio rápido y muy atentos.Sitio recomendable para darse un homenaje.Comida: 5/5  |  Servicio: 5/5  |  Ambiente: 3/5 …Más

Comimos bien y fuimos bien atendidos en este restaurante que encontramos gracias a Google Maps. Pedimos gambas fritas, un plato original sabroso y recomendable con el que te manchas y chupas los dedos. Las anchoas estuvieron bien, y los calamares fritos correctos. El vino de la casa me gustó.

Un lugar con una atención espectacular, toda la gente que nos atendió muy atentos. Y la comida estaba buenísima, ni un solo pero. Puede parecer caro, pero por la calidad y la cantidad no lo es, volveremos seguro.

Para mi ya es un imprescindible en Laredo, producto de primera y atención muy profesional, los camareros son unos cracks. Pedimos tres entrantes bastante desiguales: la tabla de quesos muy completa, los mejillones con tomate picante buenísimos pero escasos y patatas dos salsas caseras pero normalitas. Probamos los huevos con patatas y jamón y las rabas, que triunfaron entre los niños, y el cachopo XL (buenísimo pero enorme), lomos de lubina, exquisitos, y la rueda de atún fresca, fuera de carta, simplemente brutal. Aunque estábamos llenisimos nos habíamos enamorado de una tarta de hojaldre que vimos pasar que resultó ser un postre fabuloso, igual que la tarta de queso horneada (siempre pedir horneada en Cantabria) así como los cafés, buenísimos. En total pagamos 160€ pidiendo una buena botella de vino blanco y varias de agua de litro para 7 comensales, un precio más que razonable para lo bien que comimos. Sólo tiene dos peros: que puedes llegar y que no haya sitio y los baños, que no hacen justicia a un restaurante de semejante nivel.

Comida de calidad, servicio bueno. A mejorar que por ejemplo, el plato de navajas nos pareció escaso. Por lo demás todo bien.

Un descubrimiento en nuestro viaje a Laredo. Fuimos a tomar un vino y nos consiguieron una mesa aunque tenían todo reservado. El camarero que nos atendió un encanto. Probamos las zamburiñas, una ensalada de aguacate y salmón y un cachopo. Como guinda tarta de fresa y tarta de queso. Unas de las mejore que é probado! Un 10 ☆☆ volveremos!

Hemos comido en un ambiente muy acogedor atendidos por excelentes profesionales . Además tiene una extensa carta con productos extraordinarios.