Restaurante Orgánico Pura Vida en Alcalà de Xivert

Un desastre. El chico prepara la comida sin camisa y sudando . La camarera no se entera de nada , nos intentaron cobrar de más en el ticket. Y la comida es muy básica y cara para lo que es. Una pena , porque el lugar es muy chulo , bonito y bien situado , pero el servicio y el personal es un desastre .

El lugar es bonito y no esta mal de precio para ser un chiringuito. Tardaron bastante en traernos una cerveza (menos de 10 personas) y no es que hubiera mucha gente.No nos dejaron pagar por separado y la verdad es que fueron un poco desagradables.Eso si, la camarera muy maja y buenas vistas al mar.

Lugar con mucha magia, junto a la playa, decoración sencilla pero con mucho gusto con pequeñas atracciones para los niños y así los padres poder estar más relajados. La atención fue muy amable y simpática por la camarera que nos atendió, la comida unas pizzas en este caso estaban estupendas masa fina y muy buen sabor. El precio fue correcto. En resumen Pura Vida.

El sitio está a las afueras del pueblo de Alcoceber, se accede bien por una carretera secundaria. Tiene una terraza grande con mesas, hay columpios y unas camas elásticas para los niños (son de pago: 3 euros por 10 minutos).El personal es amable y atento, el ambiente es relajado y tranquilo, hay buena música, luz tenue, buenos cócteles y se respira buen rollo. Lo malo, para mí, es la carta, que para los niños tiene poca variedad.Comimos bien y tranquilos pero al ir con niños no creo que repitamos.

Ambiente relajado y trato amable y familiar. Comida recién hecha. Está todo rico pero no pasa de la normalidad.Pedimos un café descafeinado y la respuesta del camarero es que el dueño no compra porque no le gusta, y el que quiera un café descafeinado que se vaya otro sitio a tomárselo.Bastante surrealista.

Un lugar para cenar muy tranquilo y de comida casera. Cabe destacar la hamburguesa de tofu, riquísima y las pizzas también.Los camareros muy amables y atentos.Los precios son súper asequibles.Además con aparcamiento para el coche enfrente.Volveremos!

Lugar muy tranquilo para tomar algo, comer informal. Muy agradable y con unas vistas al mar espectaculares. Muy recomendable para comer sin lujos después de ir a la playa. Y por la noche con tu musiquita y tú copa.

Un sitio genial para desconectar frente al mar! Comida vegetariana, sencilla pero sabrosa. Buena música y el dueño muy simpático, t hace sentir como en casa. Además tienen cócteles elaborados x ellos que están muy bien! Repetiré seguro!

Este sitio es superguay, la música, la gente y los que lo llevan, muy majos, el horno de leña de las pizzas y la comida huelen espectacular. Sitio para disfrutar con tranquilidad.—En verano no pude ir a comer, este puente de octubre hemos ido dos veces, y me reitero, qué bien se está, se disfruta, de las pizzas y ensaladas, y la música! Gracias a Victor y su compañera!! Esperando volver!