Formentor en Madrid

No me gusta su café. El que servían en anterior ubicación, mucho mejor. Repostería espectacular! Presentada con exquisito gusto.

Impresionantes las ensaimadas … tampoco se quedan atrás las palmeras de chocolate 🍫. Buen café

Las ensaimadas de Formentor son para mi paladar las mejores de todo Madrid sin lugar a dudas. Por obras en la calle han perdido temporalmente la terraza pero como hoy estaba por llover no la he echado de menos.Como “pega” decir que en proporción el café con leche me ha parecido ligeramente caro, ya que el café cuesta 2€ frente a los 2,90€ de la ensaimada con nata (espectacular de calidad y sabor tanto el bollo como la nata).

La atención rápida y amable. Las ensaimadas bien con forma adecuada y sabor. Los torteles, sabor y materia prima bien, pero la presentación, forma y aspecto no está muy cuidada. Deberían mejorarla, ya se sabe la mujer del cesar....

Si tienes antojo de una buena ensaimada en Madrid, este es tu lugar. Te las preparan en el momento y están deliciosas. Muy recomendable.

Las ensaimadas son una locura!! La mejor ensaimada de Madrid la venden aquí. De la palmera de chocolate puedo decir que el hojaldre se deshace en la boca junto con la buena cobertura de chocolate que es generosa la cantidad. La crema pastelera de la napolitana deliciosa. El pan con aceitunas también lo compramos aquí. El café es muy bueno

Sin duda si tienes antojo de reporteria mallorquina no tienes que viajar a Mallorca, solo acercarte a este sitio para probar todo lo que tienen. Todo está espectacular: ensaimadas, bollos con sobrasada, torteles...¡Todo espectacular! Solo les falla un poquito de alegría para atender, que las chicas que hay parece que están enfadadas. Pero sin lugar a dudas...tienes que venir porque repetirás.

He comprado varias veces ensaimadas aquí y son increíbles pero hoy he comprado 3 ensaimadas pequeñas y un croissant y la ensaimada de chocolate era de ayer o de primera hora de la mañana. Dura como una piedra. Una auténtica decepción.

A pesar del cambio de local, ha sabido mantener su esencia, ya sea con los dulces o con el café. Mención especial a los roscones, las torrijas y mis favoritas las ensaimadas de nata