Restaurante Puerta de Toledo en Madrid

Es una cafetería bastante mona, con buenos cafés y pasteles. Pero si algo cabe destacar es a una de sus camareras, Chelo. Una mujer muy simpática, muy agradable y servicial, nos ha tratado fenomenal y desde luego volveremos gracias a ella. Esperamos verte de jefa la próxima vez!!

Muy mal servicio, además cuando un cliente se va las camareras comentan sobre el como... mira que desagradable, este taxista viene solo al baño... muy cosas así. Viven del hotel que es si no..

Es un bar que desde cambió de dueños es caro para el servicio que dan e igual que la pastelería para la relación cálida-precio no se Muy buena

Caro de narices, es un malgasto de dinero.

La atención al cliente pésima, nunca les dura un camarero un mes y siendo nuevos los dejan solos, y los precios desorbitados.. 3,45€ cafe y croissant. Ademas los precios son oscilantes ya que creo que nunca me han cobrado lo mismo dos veces, pero eso si, siempre caro. Vivo al lado y le he dado muchas oportunidades pero esta fue la última. Nunca mais.

La atencion deja bastante que desear,con ub trato desganado del personal y despota. Conozco este sitio desde hace mas de 20 años y nunca fue genial,pero ha llegado a un limite inaceptable.Los desayunos son muy pequeños.Pedi un colacao con tostadas y estas no podían tener un tamaño mas ridículo,al igual que la taza del colacao que solo era de café.

El trato nefasto. Llevo tres meses acudiendo a este local de forma regular, y siempre tengo que esperar más de 20 min para que me atiendan. Atiendan primero a la gente más mayor, cuando he llegado yo la primera y me deberían de atender a mi primero. Nunca volveré.

Hoy 11/04/2016) he estado con mi madre anciana y el camarero ha pasado de nosotras, como si fuéramos invisibles. Mi madre quería merendar y de paso tomarse su medicación, el camarero no nos miro, no había mucha gente y todos estaban atendidos, cuando nos fuimos ni Sr molestó en preguntar porque salíamos por la puerta... 15 minutos de espera es más de lo que alguien puede aguantar, al menos si hubiera dicho «ahora mismo las atiendo» o algo parecido. Era una persona sudamericana (lo digo para que su jefe sepa a quien me refiero)Eso si, me voy a dedicar a decírselo a todo el mundo que conozco que no vayan.UNA VERGÜENZA!

Antes se llamaba URVI y ahora parece que lo cambiaron pero sigue en la misma línea, menú del día y platos combinados en una zona limítrofe de la vorágine de la Latina, para comer tranquilo y en plan casero.