Casa Dorine en Marbella

Personal amable y profesional. Cocina clásica con toques de autor, minimalista y muy bien presentada. Me equivoqué al pedir una copa de vino Preludio 14€.

Comida y trato excelente. Variado, de temporada y de gran sabor. Muy recomendable. Los platos son muy originales. Y con suerte te atiende el chef!!! Todo un privilegio!!!

Sin comentarios. No hay obligación de tener algún detalle, pero 40 euros de propina no se dan todos los días. Un error nuestro.

Un buen restaurante en el pueblo de Marbella., al lado de la plaza de los Naranjos.La comida muy buena, la atención estupenda el restaurante muy bonito.Muy recomendable.El precio un poco alto.

Esta claro que un restaurante con valoración michelín no iba a decepcionarEn todo momento el servicio esta pendiente de cada una de las necesidades de los comensales, bastante agradable en todo momento.El sitio invita a coger comida para compartir para degustar cada uno de los platos que ofrecen que son muchos y variados, y creo que nadie va a salir insatisfecho de la experiencia.Más que necesario reservar la mesa.Un sitio muy recomendable.

El servicio fue muy atento y nos explicaba todo y la comida fue espectacular. Lo que más nos gustaron fueron las ostras con manzana, el foie gras y el tartar. El precio es algo caro pero va acorde a la calidad y al sitio.

Muy bien todo. El personal súper amable, aunque a veces se les veía que no llegaban a todo. El chico que nos tomó nota de la comida nos explicó cada plato y cómo tomárnoslo para coger todo los sabores.Pedimos ostras, que estaban sabrosas y fresquitas; un tartar de atún de almadraba con ajoblanco que estaba tremendo; una corvina salvaje muy sabrosa; un mollete que nos sorprendió por lo sabroso; y lo mejor, unas gambas blancas que estaban servidas en modo ceviche que fue lo mejor de la cena sin duda alguna.El precio estaba dentro de lo normal, teniendo en cuenta que estaba en pleno centro histórico de Marbella.

En el centro de Marbella y entre sus calles estrechas se haya este restaurante que sorprende por su blancura y limpieza, el servicio es lento, pero sus platos bien presentados y ricos incluidos los postres. Para aparcar osea recomiendo en parking mercado municipal.

Veo estupendas opiniones, por lo que quiero pensar que tuve mala suerte el día que fuimos a cenar, pero lo cierto es que nuestra experiencia aquí acabó siendo una de las cenas más lentas de mi vida.El servicio era lento, para todo; para tomar comanda, para traer bebidas, para sacar los platos... Además, para pedir más agua, o pan, o los postres, o la cuenta, teníamos que insistir varias veces hasta que nos hacían caso. y eso que estaba casi vacio esa noche.La comida estaba buena, pero el problema con la velocidad hace que mi experiencia general no se asatisfactoria.