Tapería Os Alboios en Vigo

Luces y sombras. Ricos calamares y zamburiñas, en un lugar agradable. Se confunden en servir un coruxo de 80 euros para una señora de 75 años sin avisar del precio. Cuando algo sale de lo normal se enseña la pieza y se dice el precio. No todo vale para hacer el día y los valores y honestidad tienen que ser lo más importante cuando tus clientes son vecinos de la zona.

Habíamos ido con anterioridad y fuera bien. Pero esta última vez hemos salido decepcionados. Han tardado muchísimo para servir la comida, las raciones son más pequeñas que antes, aunque nos dijeron que no. Pedimos más picaña y patatas porque nos habiamos quedado cortos. Tardaron tanto con las patatas que las comimos solas al final.El precio en algunas cosas es excesivo. El sitio es bonito y las camareras son agradables, pero creo q hay mala organización. Sobran mesas o falta personal, y eso que no estaba lleno. No me han quedado ganas de volver. Lo siento.

Coqueta tapería a la que no le hace ningún bien el entorno que la rodea (bajo los pilares de una autovía y alguna que otra construcción en muy mal estado). No sencillo de llegar, salvo por las indicaciónes de Google Maps. Pero una vez allí, te encuentras en un lugar precioso, con un ambiente muy relajado y muy bien atendidos. Variedad de platos y tapas, aunque quizá un poco elevados de precios. Raciones suficientes aunque deberían explicar más cómo son las mismas en el caso de ser compartidas por varias personas para no resultar un poco escasas o imposibles de repartir. Con aspectos mejorables, pero muy recomendable.

Me gusta mucho la comida, el servicio es rápido, el local interior muy bonito y el de fuera muy acogedor. Relación precio calidad bueno

Personal super atento y agradable. Decoración y entorno genial. Comida aceptable.

Lo encontramos de casualidad por que fuimos a hacer unas gestiones por la zona y nos sorprendió mucho.Carta pequeña con un par de entrantes que llaman mucho la atención.Nos pedimos unas croquetas y un churrasco para compartir y muy rico.Con ganas de volver para poder seguir degustando los platos que nos faltenSitio muy bonito para ir en familia, tiene una finca grande por donde pueden entretenerse los niños.

Dando por hecho que el día de la madre los restaurantes están a tope, creo que esperar por la comida una hora y cuarto es demasiado, sobre todo cuando vas con niños. Si no hay capacidad para servir todas las comandas en un tiempo razonable, quizás es mejor reducir el número de mesas. No repetiremos.

Muy bien, relación calidad precio. La atención muy bien también. Sitio para repetir.

Rico, no hay más que decir, el entrecot está de muerteeee y la picaña, uff los calamares, madre mía! Si tuviera dinero comería ahí todos los días 🤣