Turquessa Beach en Cullera

Hemos ido a cenar con reserva y bien.El sitio está muy bien, en el paseo marítimo y tiene mesas, todas en exterior, bajo techo y al aire libre.La atención del personal muy bien, amable, sevicial y nos ofrecieron buenas recomendaciones.Pedimos unas bravas, tratar de salmón y gyozas, estas eran recomendación del día.Todo bueno, bien presentado y cantidades óptimas.Nos sorprendió que las gyozas fueran recomendación ya que no eran nada del otro mundo, bastante normales incluso tirando a mal (frecuentamos muchos restaurantes japoneses).Pedimos tarta de queso de postre, muy buena.Precios medios.Quitando algunos detalles, bien, recomendable, volveremos.

No teníamos duda que este año volveríamos a cenar allí. No decepcionan. Desde que te reciben hasta que te vas el trato es increíble. En especial la persona que te hace las reservas. Nos ha tratado de 10. Siempre muy atenta y dispuesta a agradar. Si quieres cenar muy bien en un sitio tranquilo, agradable y con un buen servicio, ese es el sitio.

Estuvimos con la familia comiendo. Pedimos de encargo una paella mixta y unos entrantes para antes. Estaba todo bueno pero las raciones son normales tirando a un pelin escasas. Lo que si están es muy bien presentadas lo que le da imagen de mayor categoría. La paella muy rica, y los postres muy curiosos. El carpaccio de piña muy dulce, fresco, rico y curioso por lo diferente.Por favor si te ha ayudado dame un like y así me ayudas también tu a mi. Gracias ;)

Muy buen restaurante en primera línea de playa. La comida era de calidad por un precio asequible. Pedimos patatas bravas, verduras en tempura, pulpo y gambas crujientes y todo estaba muy bueno. Nos sirvieron la comida muy rápido y las camareras son muy amables y atentas. El único punto negativo es que los postres, quizás, eran un poco escasos. Por el resto, todo muy bien. Conviene reservar.

Comida muy buena, pero algunas cosas incluso frías, entrecot, café… No recomiendo ir a horas puntas: cenar viernes o sábado, había una chica jovencita muy agradable, el resto del personal bastante seco. Cenamos de 22:30 hasta la 01:00 que nos trajeron los cafés, la comida vino muy escalonada, no pudimos cenar juntos. La comida genial pero el servicio no.

Fuimos a cenar en pareja y la atención del personal fue muy correcta y servicial.En cuanto a la comida, probamos la ensaladilla rusa, muy bonita presentación pero estaba realmente sosa, una lástima porque pintaba muy bien; de segundo pedimos la hamburguesa vegana y la de carne de angus, no estaban para tirar cohetes, las patatas fritas lo mejor.

Sitio bonito, con terraza al lado del mar, trato súper amable, nos atendió Fina, la comida riquísima, todo lo que comimos súper bueno, probamos la sangría Blanca ,hecha con cava , espectacular , todo tipo de facilidades con mi amiga que es alérgica al gluten y a la proteína de la leche. Incluso pudo comer postre. Repetiremos sin duda lo ,y los postres buenísimos, la crema Valenciana, súper cremosa y suave, y el carpaccio de piña con helado de mango, riquísimo.

Desde el inicio la Camarera que nos hizo la reservación (una chica morena) nos trató muy groseramente. Nos ponía mala cara para todo y nos hablaba a los golpes.La paella que pedimos estaba muy pobre y pasada de sal, también estaba muy costosa para lo que era.Solo nos trató adecuadamente otra Camarera que se nos acercó y fue quien nos quiso cambiar la Cigala dónde nos salió un mosquito.De verdad fatal. Una atención malísima de parte de esa camarera.

Muy agradable y buen servicio; sitio inmejorable frente al mar. La comida muy buena (tanto las tapas como las hamburguesas). Repetiremos sin duda para probar el arroz que tenía buenísima pinta.