La Tagliatella - Esplugues en Cornellà de Llobregat

Las veces que he ido a cenar, he salido muy satisfecho, buena pasta y buenas pizzas. El personal muy amable, en todo momento, no tengo ninguna queja, buenas profesionales siempre que he ido.

La comida igual que en los otros restaurante de la cadena, pedimos sacar un pastel por un cumple y no nos dejaron.

La comida estaba muy buena pero el encargado es muy maleducado. Éramos el único grupo que tuvo en toda la noche y nos contestó mal cuando le pedimos que dividiera la factura, cosa que necesitamos para justificar el gasto en la empresa. No voy a volver solo por no aguantar a ese señor

Buena pasta y pizzas, calidad precio correcta, un clásico de comida italiana.

Los platos de pasta siempre son abundantes, los postres me sorprendieron para bien

Muy mal trato al llegar, camarero mal educado y dirigiendose de malas maneras. La verdad que no nos quedamos a comer porque la sensación al entrar ha sido de lugar lúgubre y poco higiénico. Añadiendo la mala educación. Cero recomendable.

Trato y servicio pésimo. Hemos ido a comer a las 13:40h, estaba el local vacío (únicamente dos mesas ocupadas) y nos han hecho esperar 10 minutos para sentarnos. Los camareros estresados y con diferencia el hombre “responsable de sala” como si tuviera la afluencia de un Primark un sábado tarde. Mal trato y mala comunicación hacía los clientes, sobretodo de este último encargado, hay que tener saber estar para poder trabajar cara el público, los clientes no tenemos la culpa de lo que le pase en su vida personal o de su nula capacidad para gestionar el estrés. El resultado de esto: mesas mal atendidas, tiempo de espera largo y si tienes que pedir algo es como si estuvieras molestando.Para rematar la comida, nos encontramos un pelo incrustado en la pasta ( imagen adjunta) lo comentamos en cuanto lo vemos y la respuesta de este “encargado” es la siguiente:- que en este lugar no trabaja ninguna mujer que se le pudiera haber caído el pelo, cuando podemos observar en la sala, dos camareras con el pelo suelto y sin las medidas necesarias de higiene para la correcta manipulación de alimentos.- que lo tendríamos que haber dicho antes de comer el plato, ¿ cuándo se lo decimos, si el pelo estaba enterrado en la salsa y incrustado en la pasta, y hasta que no hemos revuelto el plato no ha salido a la luz?- que ahora ya nos ha sacado la cuenta y no se puede rectificar.En definitiva, para no volver y recordarle al “encargado” que los clientes son los que mantienen con vida y a flote el negocio, si hay gente que no va a comer ni consume sus productos no hay ingresos, por eso aunque le moleste hay que tener buen trato con ellos.

Pizzeria franquicia con un personal atento, amable y profesional. La oferta que presenta es la de siempre que ofrece la marca de la franquicia, pero debo añadir que me sentí muy a gusto y atendido a tiempo en todo momento.

Comida muy buena y muy atentos